Perseguir un bien mayor es el costo que pagás por abandonar el conformismo, el autosustento… Porque ese bien no es amigo ni de la avaricia, ni de la depresión… Porque es el precio que pagás para dejar el Bien Menor.
Nos adueñamos de lo viejo, luego lo vendemos y finalmente lo extrañamos. Lo nuevo resulta “improvisado”, intentamos comprenderlo y no le hallamos sentido; en idas y vueltas el miedo nos incumbe y todo se paraliza.
“Salir de las zonas de confort” es una de las tendencias más repetidas en el lenguaje coloquial. La búsqueda de nuevos ámbitos para hallarse mejor en pos de perseguir ciertos momentos de felicidad se disipan en un horizonte claroscuro.
En las sociedades modernas hallamos un enorme avance de la globalización, pero debido a la falta de contención nos inunda de incertezas.
El filósofo, ensayista y sociólogo de origen polaco Zygmunt Bauman (1925-2017) en Vida líquida nos presenta una sociedad devoradora en la cual seres vivos y no vivos sufren una alteración en su comportamiento esencial pasando a ser objetos de consumo. El éxtasis líquido debido a los procesos globalizantes en el que la superficialidad, el manejo del tiempo, la velocidad nos provoca un boomerang sin retorno. Así, en la sociedad que vivimos actualmente de consumo líquida nos surge la duda en la confianza del peso argentino, el desapego de préstamos crediticios a corto y largo plazo, la supervivencia en el pensamiento individual.
La fragilidad en el accionar (conseguir lo que quiero y en el tiempo que quiero), nos resulta instantáneo y de poca durabilidad.
"Estamos en proceso de liquidez ayudada por el desarrollo de la tecnología online. Estamos olvidando lentamente, o nunca lo hemos aprendido, el arte del diálogo. Entre los daños más analizados y teóricamente más nocivos de la vida online están la dispersión de la atención, el deterioro de la capacidad de escuchar y de la facultad de comprender, que llevan al empobrecimiento de la capacidad de dialogar, una forma de comunicación de vital importancia en el mundo offline", dijo Bauman.
El accionar de a uno como así también el brillo personal vislumbra una sociedad argentina con una falta de fuerzas estratégicas mancomunadas.
(*) Politóloga argentina-española. Twitter: @bledoroces. Instagram: @belen.ledo