Entre las propuestas que rompen el molde dentro del universo radial cordob é s, se encuentra Buscando el origen. El programa conducido por Marcelo Núñez y Oscar Arce tiene un objetivo claro: ayudar a encontrar el origen biológico de sus oyentes. Núñez y Arce comparten el hecho de no saber quienes son sus verdaderos padres y, en el 2017, comenzaron a transmitir sus experiencias en radio La Ranchada. La repercusión fue tan fuerte que este año decidieron mudarse a Continental donde, cada miércoles de 21 a 23, comparten historias de vida, combinadas con música en vivo y entrevistas a personajes populares.
En diálogo con PERFIL CORDOBA, Marcelo Núñez explica que hay miles de personas que no conocen su origen y que es impresionante la manera en que se comunican los oyentes desde todo el país para que los ayuden a buscar a sus padres. “Hace varios años vengo en esta búsqueda. Un día decidí hacerlo público y me llovieron mensajes solicitando consejos o alguna mano que ayudara en un tema tan difícil. En ese momento pensé: ‘si yo no puedo encontrar a mi mamá, como voy a poder ayudarte a encontrar la tuya’, entonces me junte con Oscar Arce y así surgió la idea de hacer el proyecto de radio”, recuerda.
“El delito que sufrimos es la supresión de identidad. Nadie sabe que existimos, entonces la única posibilidad de que alguien nos vea o reconozca es hacer públicos nuestros casos. Todo el mundo asocia la apropiación con la dictadura pero apropiados hubo antes y ahora también. En la dictadura tomó más resonancia, en nuestros casos no hubo un colectivo de gente que buscar, pero apropiados somos todos, los de antes y los de después. Sufrimos el mismo delito, por distintas personas. Te quitan la identidad. Vos nacés de una mamá biológica y te anotan a nombre de otra”, agrega.
—¿A qué edad usted supo que quienes decían que eran sus padres no lo eran?
—A los seis o siete años me di cuenta que vivía en una casa que no era la mía. Vos crecés en un lugar que no es propio, con gente que no conocés desde la sangre y eso se nota, por más bien que te traten. Sentía que era una jirafa que vivía en una manada de elefantes. Esos elefantes me trataban muy bien, me mandaban al colegio, me daban de comer, pero yo era jirafa, nunca elefante. Miraba las caras de los que estaban sentados conmigo en la mesa y ninguno me devolvía mi imagen. Eso es lo que más te angustia a lo largo de tu vida. Hay gente que se entera de grande y es mucho peor. Todo tu mundo que era una certeza, deja de serlo. Te das cuenta que viviste 40 o 50 años en una irrealidad.
—¿Qué repercusiones generó el programa?
—Nos pasaron muchas cosas gratificantes a lo largo del año pasado, que permitieron que llegáramos a Continental que es como jugar en Primera A, con todo el respeto que me merece La Ranchada. Sirvió mucho, principalmente a la gente del interior que pensaba que estaba sola o que siempre pensó que esas sensaciones que tenían les pasaban solo a ellos. Al escuchar que somos muchos y que a todos nos pasa lo mismo se han sentido contenidos. Este programa también ayuda a muchos papás a quienes le brindamos herramientas para que ellos, de a poco, pierdan el miedo y le puedan decir la verdad a sus hijos. Hablamos de padres que tramitaron la adopción y es importante destacar el hecho de que la única adopción que hay es la legal. Todo lo otro es apropiación y hasta puede ser trata de personas.
—¿De todas las historias que escuchó en su programa, alguna lo impactó más?
—A mí me impacta cuando uno escucha que hay gente que durante 30 o 40 años buscó a su mamá y cuando la encuentra, esta mamá lo vuelve a negar. Son casos muy fuertes que a uno lo movilizan. A nuestro programa nos llegan muchas historias y la idea es poder darles lugar a cada una de ellas.
Por una ley de filiación
Uno de los reclamos de Núñez es el de una ley de identidad biológica que contemple mecanismos que ayuden a las personas que buscan a sus padres. “La ley debería incluir acceso a datos o estudios de ADN. Me hice siete, todos me dieron negativo y cada uno me costó 15 mil pesos. Soy la víctima y debí pagarlo todo de mi bolsillo”. Agrega que el Colegio de Abogados les abrió sus puertas para poder trabajar en este tema. Al respecto, Patricia Guzmán, vicepresidenta de la entidad, explica que se encuentran analizando de qué manera ayudar a este grupo de personas en el proceso de armado de la ley. Además remarcó que en el Colegio funciona un consultorio jurídico gratuito que asesora a personas que no acceden al salario mínimo, vital y móvil.