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CóRDOBA
FUTBOL FREESTYLE

Luz verde al talento

Nico Agustinoy es campeón nacional y se prepara para el Mundial Red Bull en Estados Unidos. Para juntar dinero hace jueguitos en semáforos.

Agustinoy
Sueños mundialistas del crack de Villa Bustos. | FINO PIZARRO

Parece que en su cuerpo tuviera un imán con la pelota. No se le cae por nada en el mundo. ¡Están unidos! Se mueve de un lado a otro haciendo jueguitos. Piruetas y trucos por doquier. Y los ojos asombrados de quienes lo miran. “¡Guauuu!”, es la expresión más habitual al verlo a Nicolás Agustinoy practicando el fútbol freestyle.

Los ojos sorprendidos, embobados y maravillados ante este artista de la pelota son habituales en la Plaza Alberdi de barrio General Paz, o en el semáforo de la esquina de 24 de septiembre y Roma, o en un cumpleaños, o un evento empresarial, o un torneo de deportes alternativos. Nadie queda exento de sus piruetas.

Agustinoy, de 25 años, se la pasa horas y horas entrenando movimientos. Se filma para perfeccionarse o para aprender un nuevo truco. Paciencia al extremo. Pasión en su máxima expresión. Un mago del fútbol.

Génesis. Este cordobés de Villa Bustos jugaba al fútbol en el barrio. Un día su compañero, y amigo, Axel Iriarte, se lesionó la clavícula. Como no podía seguir jugando al fútbol peo amaban tanto estar con la pelota en los pies, se ponían a hacer jueguitos básicos. De pronto empezaron a probar trucos, miraban videos de Ronaldinho, a imitarlo, y se empezaron a entusiasmar. Tenían 17 años. Y vieron que esos trucos les salían. Hasta que un día grabaron su propio video, lo subieron a las redes y en los comentarios les hablaron del deporte “fútbol freestyle”. Se interesaron, buscaron material, y se lanzaron, ya que todos los trucos les salían. Dejaron la práctica del fútbol de once para dedicarse de lleno a este arte-deporte.

“Lo más difícil fue comentarle a nuestros padres que dejábamos el fútbol para dedicarnos a esto”, recordó Agustinoy en diálogo con PERFIL Córdoba. Un impulso que hoy tiene sus frutos. Y una gran carrera que todavía le falta recorrido: Nico ha obtenido títulos nacionales y subcampeonatos sudamericanos, y ahora se prepara para un evento mundial de prestigio.

Pasando la gorra. Recién llegado de un certamen en Bolivia, a Agustinoy por estas horas se lo ve grabando para un torneo mundial por internet “lower” y entrenando con la mira puesta en el 14 de noviembre donde asistirá a Red Bull Street Style World Final, en Miami, Estados Unidos. “Estoy juntado plata, en estos días me llega el pasaporte y tras eso debo tramitar la visa”, cuenta.

Hay cuatro disciplinas dentro del Football Freestyle: Batallas, Challenge, Ironman y sick three. Y el cordobés se destaca en las ‘batallas’.

Será la primera vez que el cordobés participe de un Mundial. Entrena como un profesional. Pero debe salir a buscar como solventarse. Por eso, más allá de buscar sponsors, se lo suele ver en las esquinas de los semáforos haciendo fútbol freestyle, y pasa la gorra. La gente se queda maravillada ante los malabarismos y trucos que hace con la de cuero. Es habitual que algún transeúnte lo aplaude, y también colabore.

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El Fútbol Freestyle es el arte de hacer trucos con una pelota.

Profesional de los “jueguitos”

Nicolás Agustinoy, de 25 años y admirador de Charly Iacono, cuenta si puede practicar de forma profesional esta disciplina.

-¿Podés vivir de este deporte?

- Gano dinero, pero depende mucho de las fechas. Cuando se vienen Mundiales, Copa América, nos llaman para eventos empresariales. Con el grupo “Córdoba Frestyle Fútbol” vamos a cumpleaños y hacemos jueguitos, cierre de temporada, distintas fiestas, premiaciones. Ahí nos pagan.

- ¿En los torneos, por ejemplo este al que te estás preparando, les pagan un dinero?

- En caso de que gane, sí. Sólo para el primer puesto.

- ¿Te dedicas a otra cosa?

- Por ahora me la banco sólo con esto. Por las mañanas hago semáforos y a la siesta voy al gimnasio y a la tarde-noche entreno en la plaza. Lo tomo de manea profesional. Debido a este torneo, estoy buscando un trabajo, que no me desgaste el cuerpo, para poder sostener los gastos que generará.