Durante los dos años de pandemia que nos tocó atravesar, hubo muchos artistas que se retrotrajeron, que entendieron que era un momento de introspección, de reflexión y de meditación. No fue el caso de Majo Arrigoni, que encontró en ese silencio y en esas calles desiertas la inspiración para trabajar en una instalación pictórica, la que inauguró el pasado miércoles en Abre Galería de Arte.
“En mi caso la pandemia fue un encierro amable que me sirvió para pintar, a muchas de mis amigas les sirvió para leer, para conectar con otras cosas. Pero hubo otra cosa también: yo fui madre en abril de 2020, en plena pandemia. Y la mayoría de la gente me decía que las mujeres artistas después de ser madres dejaban de dedicarse; cuando quedé embarazada me asusté porque yo no quería que me pasara. Entonces para mí fue una decisión: empecé a pintar de noche porque de día era un lío ya que tengo además otro hijito. Cuando los acostaba a dormir me ponía a pintar y lo hacía de 10 de la noche a tres de la mañana. Ya es una rutina”, rememora la artista.
De ahí se desprende también el nombre de la muestra ‘Desveladas’, que la representa de una punta a la otra. En efecto, Arrigoni reconoce que trabajó muy cansada y con mucho sueño, pero que fue una decisión la de poder seguir ejerciendo la actividad y el oficio más allá de las demandas de la maternidad.
DESVELADAS. La instalación pictórica refleja rostros ensimismados y meditativos, que se deslizan entre el afuera y el adentro, y lo habitan. FOTO: FINO PIZARRO
La muestra, compuesta por 13 obras en exposición, es el resultado de un trabajo que empieza en la fotografía. “Lo que cuento de alguna manera tiene que ver con el encierro, con el desvelo de no entender qué está pasando en el mundo. Me interesaba mucho que tuviera ese anclaje, como documental”.
Arrigoni, que viene del mundo de la fotografía, estuvo acompañada en este proceso por Mariana Robles, a cargo de la curaduría de la muestra. “Ya venía retratando mujeres artistas en plan de ponerlas en el centro de la escena, porque están invisibilizadas en la historia del arte en Córdoba. Venía trabajando en ese proceso de mostrar artistas en actividad y en pandemia empecé con este proyecto en el que quise abrir un poco más el relato. Entonces empecé a retratar mujeres leyendo a mujeres”, explica.
“Todas mis colegas artistas estaban leyendo a mujeres. Y ese es un poco el espíritu de este tiempo”.
Así, las pinturas en exposición son de jóvenes mujeres leyendo a distintas escritoras: Alejandra Pizarnik, Mariana Enríquez, Silvina Ocampo, María Gainza y Aurelia Venturini, por nombrar algunas.
“Todas las artistas que están retratadas en mis pinturas son cordobesas. Hago un poco el trabajo del fotógrafo, de querer encontrar el gesto, la situación; incluso las he retratado varias veces hasta conseguir lo que estaba buscando. Porque a mí me interesaban dos cosas: en primer lugar, que estuvieran con un libro en la mano y por otro lado, que tuvieran la mirada perdida. Y como ellas no son profesionales de la actuación, entonces no fue tan fácil”, señala.
Con la idea de llevar la muestra a otros espacios, Arrigoni está hoy radicada en Córdoba y no tiene planes de dejar la ciudad: “Me encanta pensar en rescatar todas las particularidades de acá. Aunque pueda hacerlo desde otro lado, por ahora me interesa contar la historia desde mi ciudad”.
MODELO. Cecilia Cordi, una de las artistas plasmadas en la serie, posa junto a su retrato. FOTO: FINO PIZARRO
“Decidí dedicarme al arte gracias a Antonio Seguí”
Majo Arrigoni cuenta que ha tenido muchos referentes a lo largo de su carrera. Pero en materia de pensamiento, quien la marcó profundamente fue Antonio Seguí.
“Yo viví en su casa de París, en 2008. Y, si bien siempre me había gustado el arte, después de ese viaje y de haberlo conocido, volví a la Argentina decidida a dedicarme al arte”. En efecto, la artista se había ido a París con su contacto en el bolsillo. Tras permanecer un tiempo allí lo contactó por mail y él la invitó a visitarlo.
“Él era muy generoso, una persona hermosa a quien he querido mucho pero cuando le pedía la mirada de artista era súper riguroso. Me tiraba devoluciones bravas, tipo: si quiere ser artista se va a tener que poner a trabajar en serio, pero el color ya lo tiene y eso es muy importante porque con eso se nace”.
Con el tiempo y por razones azarosas, Arrigoni volvió a la Argentina y empezó con la fotografía. “No tenía conocimiento de la escena, entonces iba a las muestras, buscaba a los artistas y les decía que quería retratarlos. Pero en realidad lo que buscaba era ir conociendo los espacios. Y así empezó a surgir un proyecto que se terminó llamando ‘Retrato de artistas’, que expuse en el Cabildo Histórico de Córdoba y en el museo Emilio Caraffa”.
PARA VISITAR
- ‘Desveladas’ puede visitarse en Independencia 828 (PB) hasta el 26 de mayo –de miércoles a viernes de 17 a 20–, con cita previa y contemplando los protocolos sanitarios vigentes. (Para acordar una cita, comunicarse a [email protected]).