El endurecimiento de las medidas para frenar los contagios de coronavirus por parte del Gobierno nacional generaron la inmediata reacción de representantes de la oposición que apuntaron contra las restricciones a la libertad, la supuesta inconstitucionalidad de las decisiones y la necesidad de cuidar el rumbo económico en simultáneo a la cuestión sanitaria.
Las primeras repercusiones surgieron el jueves cuando había trascendido que el Gobierno planeaba restringir la circulación a nivel nacional después de la medianoche, medida que se fue suavizando con el correr de las horas y que quedó en una recomendación a los gobernadores de “priorizar la limitación de circulación” que se plasmó en un DNU presidencial.
“Los jóvenes son los que tienen la oportunidad de construir el país de la libertad. No tienen por qué cargar con la culpa de las malas políticas del Gobierno Nacional. No se dejen amedrentar, estoy para bancarlos!”, arengó la jefa del PRO, Patricia Bullrich, el viernes, tras advertirle al Gobierno que si sus intenciones tenían que ver con avanzar con un “toque de queda”, la decisión tenía que pasar por el Congreso.
Desde el radicalismo, el jefe partidario y diputado nacional Alfredo Cornejo había anticipado que las medidas que pretendía tomar Alberto Fernández “son la clara demostración del fracaso de la estrategia sanitaria”. “Son el tiro de gracia a la economía de los argentinos”, aseveró. Cornejo conoce la realidad del interior porque hasta 2019 fue gobernador de Mendoza y precisamente su sucesor Rodolfo Suárez fue uno de los que anticipó que no estaba dispuesto a cortar la actividad nocturna en plena temporada de verano, en una región en donde el turismo tiene un fuerte impacto.
El jefe del interbloque de senadores de Juntos por el Cambio, Luis Naidenoff, puso el foco en las “marchas y contramarchas” del Gobierno y lamentó que “no son una sorpresa”. El radical es representante de Formosa, la única provincia de todo el país que no avaló la actividad turística y que debió acatar un fallo de la Corte Suprema para que deje entrar a los varados. “Responsabilizar a los jóvenes por las fallas de la política es una muestra más de irresponsabilidad e incapacidad del gobierno en el manejo de esta pandemia”, cuestionó el senador.
También se sumó a la lista de críticos opositores el diputado mendocino Luis Petri que se refirió a la restricción de las “libertades individuales” un concepto que abrió el debate mediático y que le valió la respuesta del ex jefe de Gabinete e interventor de Yacimientos Carboníferos de Río Turbio, Aníbal Fernández, que ironizó que “repiten como loritos las estupideces que dice Sabsay” en alusión al abogado constitucionalista siempre crítico con el oficialismo.
“Restringir las libertades individuales y el estado de excepción permanente como únicas respuestas a la crisis sanitaria, es una medida muy peligrosa desde lo social e institucional”, se quejó el diputado de la Coalición Cívica y jefe partidario nacional. Maximiliano Ferraro, en sintonía con Cristian Ritondo, presidente de la bancada del PRO, que reprochó que “antes fueron los runners y ahora son los jóvenes. Intentamos copiar a Europa pero sin planes. Porque lo importante es buscar culpables, no soluciones sanitarias responsables”.