Tras la polémica generada en torno a la compra de insumos esenciales y la contratación de hoteles para personas con coronavirus, el gobierno porteño decidió cambiar los procedimientos habituales de adquisición de estos elementos, además de aclarar los cuestionamientos al respecto.
Se trata de dos casos en particular. El primero fue la contratación de 28 hoteles a la vez, todos ellos con un precio promedio de $ 1.000 por habitación más IVA y cuyas habitaciones tuvieron que estar disponibles de inmediato. Mientras que el segundo caso tuvo que ver con la compra de 1.600 barbijos profesionales a un precio de 3.000 pesos por unidad. En este sentido, y atentos a la presencia, en las empresas contratadas, de familiares directos tanto del jefe de Gobierno como del jefe de Gabinete de Ministros, la Ciudad dispuso una investigación interna y separó a los dos funcionarios de las áreas involucradas en la compra y la contratación de los insumos necesarios para combatir la pandemia de coronavirus. En este caso se trató de Gonzalo Robredo, titular del Ente de Turismo porteño, y Nicolás Montovio, subsecretario de Administración del Sistema de Salud.
De todas maneras, en ambas situaciones se cumplieron todos los pasos previstos en los procesos de compra. Y en ninguna de las dos se pagó lo contratado. A raíz de estos inconvenientes, desde el martes pasado se modificó la organización interna de las compras de insumos en el marco de la emergencia sanitaria vigente.
En el caso de los hoteles contratados, uno de ellos fue el BA Central, en el que se alojaron personas con sintomatología y diagnóstico de Covid-19. Ese hotel se contrató originalmente con la empresa Midas Hotel Management. Esta empresa administra el establecimiento, pero en su directorio participa la hermana del jefe de Gobierno. En este sentido, y según informan desde la sede de Parque Patricios, el propio jefe comunal no estaba al tanto de la contratación directa por razones de emergencia sanitaria realizada por Robredo, de $ 5.439.511.
Barbijos. El segundo caso fue la compra de barbijos, cuyo precio fue cuestionado. Para abastecer al sistema de salud de los barbijos con filtro de partículas N95 se realizaron hasta ahora tres procesos de compra y se llamó a cotizar en cada una de ellos a más de cien proveedores del sector inscriptos en el Registro Unico de Proveedores del gobierno porteño. En ningún caso se recibieron ofertas al respecto. En este contexto, y dada la urgencia de disponer de estos insumos para cuidar al personal de salud en la emergencia sanitaria, el 5 de abril se compraron a la empresa Green Salud 1.600 barbijos por $ 3.000 cada uno. Fue el valor mínimo al que estaba disponible en el mercado al momento de la compra. Cabe aclarar que el hermano del jefe de Gabinete no tiene nada que ver con esta empresa. Es socio en otro emprendimiento y no tiene relación alguna con el Gobierno de la Ciudad, una situación no cuestionable.
“Se hizo lo que se tenía que hacer. Se inició una investigación y se aceptó la renuncia de los dos funcionarios. Además, se reforzaron las medidas de compras y licitaciones en la certeza de que no hubo ningún procedimiento irregular”, aseguró Diego Santilli, vicejefe de Gobierno porteño. “Ahora vamos a poner una plataforma en internet donde todos los vecinos podrán ver en detalle todas las compras que se realizan en el marco de la pandemia”, completó el funcionario.