Fue una decepción. No por lo que podía pensarse en la previa, sino porque el equipo argentino compuesto por Angel Cabrera y Andrés Romero lideró la competencia durante buena parte de las cuatro jornadas en las que se desarrolló la Copa del Mundo de Golf. Sin embargo, la dupla nacional se cayó en los últimos hoyos y terminó quinta luego de jugarse la última ronda en los campos del Sandy Lane Country Club, en Saint James, Barbados. Los campeones fueron los alemanes Bernhard Langer y Marcel Siem.
La pareja Cabrera - Romero ejecutó ayer una vuelta de 73 golpes, dos sobre el par de la cancha, en la modalidad foursome (es decir golpes alternados), con lo que acumuló 271 impactos.
Al igual que en las últimas dos vueltas, una vez más el juego sobre el green sepultó las esperanzas argentinas de quedarse con la Copa del Mundo y los representantes de nuestro país debieron conformarse con compartir el quinto puesto junto a Estados Unidos y España.
" No jugamos bien el green durante los últimos días y eso es clave para ganar. Si no embocas no hay manera de hacer score", dijo el “Pato” Cabrera.
"Fue una gran experiencia pero con un poco de bronca porque lo dejamos escapar. No hay mucha explicación, sólo fallamos arriba del green y eso fue fundamental", dijo Romero.
Alemania, con Langer y Siem, obtuvo el título tras imponerse en un hoyo desempate a los escoceses Colin Montgomerie y Marc Warren, luego de que ambos dúos finalizaran las cuatro ruedas empatados en el primer lugar con un total de 268 golpes.
Los suecos Carl Petterson y Henrik Stenson, líderes hasta el inicio de la vuelta de hoy, tuvieron un bogey en el último hoyo que los llevó al tercer puesto.