Santiago de Chile - Los países latinoamericanos pierden anualmente cientos de miles de millones de dólares debido al rezago en la incorporación de tecnologías a sus procesos económicos y gubernamentales, según estimaciones oficiales.
Todavía hoy, menos del tres por ciento de los latinoamericanos accede a Internet de banda ancha en su hogar y menos de un 16 por ciento posee una computadora privada, según datos de los gobiernos. Por ello, los 340.000 ingenieros informáticos y los 280 millones de celulares que existen en la región son avances aún insuficientes, para digitalizar los procesos productivos e impulsar una aceleración del crecimiento.
"Las tecnologías de la información explican sólo un diez por ciento del producto interno bruto en la región, en comparación con el 50 por ciento que alcanza en naciones desarrolladas", dijo a la agencia de noticias dpa el experto alemán Martin Hilbert de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
El mayor atraso está en la mencionada incapacidad de informatizar los procesos productivos y comerciales de las pequeñas y medianas empresas, que representan millones de unidades en la región. Por ahora, Chile, Argentina, Uruguay, México y Colombia lideran los progresos en esta área.
En contraste, el Caribe y la Región Andina son las zonas más atrasadas. Algunos de los mayores problemas se vinculan con el acceso a equipos. En cifras, aún hoy sólo existen 20 líneas telefónicas por cada 100 habitantes. La relación cae a la mitad en el Caribe. La situación es aún más dramática respecto de la tenencia de computadoras. En el Cono Sur sólo un 15 por ciento de las personas posee una. Cifra que cae a un cuatro por ciento en el Caribe. No obstante, Hilbert valora que existan en la región 150.000 centros públicos de acceso a Internet, la mayoría de los cuales se ubican en México (58.000), Argentina (28.000), Perú (19.000), Brasil (16.000) y Ecuador (10.000). "Este es un logro único de América Latina que puede apoyar fuertemente la inclusión social", opina Hilbert, Coordinador del Programa Sociedad de la Información de CEPAL, que articula iniciativas regionales de fomento de las TICS.
Pero una mayor inclusión requiere un uso más intensivo de la tecnología por parte de los gobiernos, en lo referido a salud, pensiones, capacitación y asistencia social. Sorpresivamente, hasta ahora los países latinoamericanos lideraron la presencia en Internet de páginas de sus gobiernos, pero no traspasaron esa iniciativa a una mayor digitalización de sus procesos. La excepción la constituyen Chile, México y Brasil, los gobiernos que más avanzaron en la digitalización de trámites y acciones públicas. No obstante, en la totalidad de las naciones el mayor rezago está en el sector salud, seguido por problemas en educación. Por ejemplo, ocurre la paradoja de que las páginas web de los Ministerios de Salud no incluyen información sobre prevención de enfermedades o no difunden capacitaciones, explica Hilbert.
Para revertir la situación, los gobiernos latinoamericanos negocian ahora un plan de acción con metas concretas hasta 2010, que persigue acortar la llamada brecha digital, en una región donde el hambre sigue siendo un sufrimiento diario para 80 millones de personas.