Bulgheroni: “Estamos casi al borde de que el petróleo empiece a subir”

Desde Madrid
“El precio del petróleo va a llegar a niveles de entre US$ 60 y 70 el barril en un año o año y medio”. El vaticinio no lo hizo cualquiera. Son palabras de Alejandro Bulgheroni, accionista de la petrolera Panamerican Energy, que exporta el 40% de su producción, al inaugurar en Madrid el ciclo de conferencias  La Tribuna América de Inversión, una iniciativa de Casa de América y el Capítulo Ibérico del Consejo Empresarial de América Latina (CEAL), al término de la cual el empresario respondió preguntas a PERFIL.
No es habitual escuchar a quien, junto a su hermano Carlos, ostenta la mayor fortuna de la Argentina según la revista Forbes con cinco mil millones de dólares. Pero PERFIL presenció el lunes pasado esa charla ante una audiencia reducida pero selecta, entre quienes se encontraba el embajador de Argentina en España, Carlos Bettini.
—¿Cómo cree que podría afectar al negocio el hecho que el precio del barril se estabilizara en los valores actuales?
—El precio va a hacer que se produzca la energía que se puede producir a ese precio, y la oferta y la demanda van a dominar el mercado. O sea que cuando nos quedemos sin petróleo, y haya presión por la demanda, lógicamente  va a subir el precio. Yo creo que estamos al borde de ese nivel. Las empresas ganarán más o ganarán menos, y van a producir aquello que puedan producir con cierta ganancia. Uno puede encontrar un yacimiento de gran productividad, puede perforar y producir petróleo, pero eso no satisface toda la demanda, entonces tiene que ir a buscar más, más y más, y así es como se van produciendo petróleos más caros que, que en promedio, pueden ir satisfaciendo cierta demanda, pero no toda. Y éste es el gran dilema que estamos viviendo en este momento.
El petróleo bajó de US$ 100 el barril a menos de US$ 50 en seis meses. Bulgheroni, acompañado por el secretario general Iberoamericano, Enrique Iglesias, atribuyó el descenso a la tecnología del ‘fracking’ y el acceso a los recursos de petróleo y gas ‘shale’ confieren a los Estados Unidos particular influencia mundial, dado que el aumento de la oferta energética presiona a la baja los precios. En este sentido, fue muy claro: “Yo creo que el problema está visto desde Estados Unidos y la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), y tiene que ver con el mercado energético americano” porque “aquí se produce un problema de competitividad: los Estados Unidos pasan de hablar de autoabastecimiento a exportación”, y “los países de la OPEP deciden no seguir manteniendo el precio del petróleo y que sean la oferta y la demanda los que dicten el precio del barril”.
“¿Quién gana y quien pierde con esta situación?”, se preguntó Bulgheroni. “Vemos que Rusia, Venezuela, Irán, y otros países africanos, que se dice que financian a terroristas islámicos, verán reducidos sus presupuestos dificultando esta actividad”, expuso el empresario. “Por otro lado, la disminución del precio de la energía va a generar mayor crecimiento en los países desarrollados y también en desarrollo”, explicó. “Estados Unidos, que ya había empezado a crecer, con esto tiende a un mayor crecimiento, y Europa, que le costaba salir de la crisis, con esta situación, va a tener la posibilidad de acelerar esa salida”, estimó el empresario.   
Luego prosiguió: “La pregunta difícil de contestar es: ¿Cuánto durará esta situación? La OPEP tiene un peso relevante en la producción mundial de petróleo alrededor de un 39%, además de las grandes reservas le han permitido ser el que fijó el precio del petróleo. ¿Cuánto tiempo podrá resistir Arabia Saudita,  aguantar la presión de los otros países que dependen tanto del petróleo? ¿Y cuán rápido va a ser el aumento de la demanda si tenemos un importante proceso de crecimiento a nivel mundial? Yo creo que esto es lo que va a impactar y éstas son las grandes incertidumbres que son muy difíciles de evaluar”, dijo.
Respecto de las soluciones para encarar el futuro en el campo energético, Bulgheroni explicó que “hay que encontrar tecnologías que nos ayuden a ser más eficientes para explorar y producir hidrocarburos” y aventuró: “Yo puedo producir energía solar pero si pudiéramos acumular energía en forma económica, para después usarla cuando no la tenemos, sería fantástico”.