A tres semanas del cambio de gobierno, son pocas las certezas de los asesores económicos que rodean al presidente electo respecto de qué cargos ocuparán finalmente. “Manejamos temas, áreas, si bien estamos en contacto y todos tenemos el mismo lineamiento, no tenemos asignado un cargo concreto”, dicen desde las filas más desarrollistas que hablan hace tiempo con Alberto Fernández sobre estrategia económica.
Esa es la respuesta de varios de ellos cuando PERFIL consultó si la falta de definiciones respecto de quiénes y cómo manejarán la economía es una duda que asalta a los banqueros y empresarios únicamente, o si también llega a los propios protagonistas.
Ante la falta de claridad respecto de quién se impondrá finalmente con nombre y apellido en cada sector, y la ausencia de voceros respecto de las primeras medidas por pedido expreso del equipo que asesora a Fernández, arrecian las versiones.
Entre el lunes y el miércoles, en tanto, emergió “el factor Sergio Massa”. El futuro titular de la Cámara de Diputados e integrante del Frente de Todos habló por teléfono con al menos dos fondos de inversión de Wall Street y recibió a otro en su oficina en Buenos Aires y bajó el siguiente mensaje: que Guillermo Nielsen, hasta ahora “hombre puesto” por su cercanía con Alberto en la conducción económica, no será el ministro de Hacienda y Finanzas que todo el mundo está especulando; Massa abundó además en que ese puesto no será para Matías Kulfas tampoco, que junto con Cecilia Todesca forman parte del Grupo Callao de pensamiento del albertismo; y deslizó que “habrá una sorpresa finalmente de Alberto Fernández con una designación amigable para los mercados”.
Con ese mensaje confirmado por sus participantes, se multiplicaron más las versiones. ¿Será Martín Redrado, cercano a Massa y con buen diálogo con el establishment local, el “guiño” al mundo de la deuda? “Lo veo difícil, tiene bolilla negra en el Instituto Patria, reflexionan los que recuerdan que testificó contra Cristina Kirchner en la causa de dólar futuro. Sin embargo, el ex Golden Boy sigue esbozando un plan económico y habla con Fernández.
Qué piensa Matías Kulfas, uno de los tres voceros económicos de Alberto Fernández
El mensaje de Massa no implica que Kulfas esté fuera de carrera. Al contrario. El ex gerente del Banco Central ocupará seguramente el cargo de superministro de Producción, y según las últimas novedades podría tener bajo su égida importantes áreas de influencias, en especial, Energía. Esa secretaría, desde donde se manejan los subsidios y las señales para Vaca Muerta, fue de fuerte disputa en las últimas horas. Podría quedar bajo la órbita del área de la caja y la deuda, si se pensaba desde esa perspectiva. Pero finalmente iría al manejo de Kulfas, enfocado en la competitividad y el acuerdo social. Quizás Kulfas también anexione algún tramo de obras públicas. Todo está en análisis, incluso sumarle Hacienda, que sea un superministro. En ese caso, Nielsen podría ocuparse solo de la deuda y depender directamente de Presidencia.
Incluso, en las últimas horas volvió la versión de que todo este run run tiene que ver con un último intento de Fernández de convencer a Roberto Lavagna, el ex ministro de 2003, de que llegue como cabeza de negociación de la deuda, o si no es él, alguien de su entorno. Por ahora, parece más factible que encabece un Consejo Económco y Social con otras figuras del pensamiento económico, un cargo que sin embargo no reemplazaría el de timonel del área financiera y las cuentas públicas, que por ahora sigue vacante.
El factor Massa
La irrupción de Sergio Massa como “vocero” de los posibles ministeriables y no ministeriables del gabinete de Alberto Fernández, que asume el 10 de diciembre, abrió un sinfín de preguntas.
¿La información que tiene es correcta? ¿Alberto Fernández lo mandó a comunicarlo a los mercados? ¿Hubo roces de Guillermo Nielsen en las últimas horas con la conducción del Frente de Todos y por eso puede perder posiciones?
Lo cierto es que tres fondos de inversión tuvieron al mismo tiempo prácticamente el mismo mensaje y tomaron nota.
Algunos entendieron que Massa estaba impulsando la posibilidad de que Martín Redrado, ex jefe del Banco Central, pueda desembarcar en ese puesto. Otros, que simplemente está moviéndose “como siempre lo hace Massa” en busca de pelear espacios de poder en el armado al que se sumó luego de una larga negociación como líder del Frente Renovador y ahora integrante de la coalición de gobierno que llegará el 10 de diciembre a la Casa Rosada.