El Fondo Monetario Internacional (FMI) presentó hoy su informe semestral de perspectivas de la economía mundial y previó para la Argentina una baja de 8,5% de crecimiento a un todavía alto 7,5%, en el marco de un descenso general para la región.
Además señaló que "las autoridades continúan confiando en medidas administrativas para mantener contenidas las presiones sobre los precios".
En su informe, el organismo multilateral de crédito recomendó a los países latinoamericanos tomar medidas para mejorar la productividad, como mecanismo para responder a un ambiente externo que no será tan favorable en 2007, año que verá caer ligeramente el crecimiento de la región a 4,9% con respecto al 5,5% de 2006.
"Revertir los muy decepcionantes resultados de productividad será clave para sostener mayores tasas de crecimiento en América Latina", donde la productividad cayó con excepción de Chile, señaló el FMI en el capítulo latinoamericano de su informe.
La entidad financiera, que sostendrá sus reuniones el fin de semana en Washington, señaló que el descenso de la tasa de crecimiento regional será generalizado, con excepciones en Brasil y Chile que experimentarán desempeños mejores que en 2006, informó la agencia de noticias AFP.
Una moderación del crecimiento global será la causa principal de incrementos atenuados del Producto Interno Bruto (PIB) en las economías latinoamericanas, entre las que se verán más afectadas aquellas con "relaciones comerciales particularmente cercanas con Estados Unidos (como México, América Central y el Caribe) o que son significativos exportadores de petróleo y metales (Chile, Ecuador, Perú y Venezuela)", indicó el FMI.
La institución señaló asimismo que la fortaleza de los precios de los granos "ayudará a exportadores de productos agrícolas como Argentina y Brasil".