La decisión de Hugo Chávez de estatizar otras empresas del Grupo Techint en Venezuela fue la gota que colmó el vaso de los empresarios argentinos, que esta semana se sintieron particularmente amenazados tanto por un nuevo avance de Hugo Moyano como por el discurso del candidato Néstor Kirchner.
Ayer, las asociaciones que nuclean a los bancos argentinos y extranjeros, la Unión Industrial Argentina (UIA) y la Cámara Argentina de Comercio (CAC), entre otras, respaldaron a Techint luego de que se conociera la decisión del gobierno venezolano.
La UIA, que conduce Héctor Méndez, fue la más dura: “Es difícil de comprender cómo el gobierno de un país que manifiesta públicamente el carácter estratégico de la vinculación con Argentina y busca estrechar los lazos productivos entre ambas naciones, promoviendo las inversiones y el intercambio comercial, lleva adelante acciones que claramente ponen en riesgo las actividades de una empresa argentina”, afirmaron los industriales en un comunicado.
Techint no se quedó atrás: su director de Relaciones Institucionales, Luis Betnaza, afirmó que la decisión de nacionalizar dos empresas de ese holding por parte de Chávez “condiciona la relación entre la Argentina y Venezuela”.
Trascendió que el titular del grupo Paolo Rocca se mostró sorprendido por la decisión de Chávez y que se enojó tanto con el gobierno venezolano como con el argentino, que hasta anoche no se pronunció sobre el tema.