Con la caída de las ventas de autos a Brasil y al mercado interno, las metalúrgicas proveedoras de la cadena automotriz empezaron a reconvertirse hacia otros sectores y apuntaron hacia el sector de petróleo y gas, de la mano del yacimiento de shale de Vaca Muerta.
Para esto, a más de mil kilómetros de distancia de la promesa de autoabastecimiento energético, nació el llamado cluster (grupo) de proveedores de petróleo, gas y minería de Córdoba, una agrupación de más de un centenar de empresas que busca proveer a las petroleras con concesiones en Neuquén. Una decena de compañías ya se convirtió en parte de la cadena desde finales del año pasado.
“El cluster surgió como alternativa ante la caída de actividad y reúne a un centenar de empresas del sector”, explicó Norberto Delfino, vicepresidente de la Cámara de Comercio Exterior de Córdoba (Cacec).
Las perspectivas de inversión para el sector son un aliciente para el grupo, que después de una serie de rondas comerciales estimó que podría generar ventas iniciales por US$ 500 mil. Las estimaciones pueden mejorar si llegan las inversiones proyectadas para el yacimiento de petróleo no convencional.
“Entre 2015 y 2020 el sector de petróleo y gas necesita un promedio anual de inversiones de US$ 10 mil millones”, explicó el economista Dante Sica, de abeceb.com. “Hoy hay capacidad saturada. El promedio de inversión es de US$ 3 mil millones anuales”, detalló.
La premisa, además de generar cooperación para aumentar la capacidad productiva y poder cumplir con las necesidades del sector de petróleo, energía y gas, busca también cortar con “la alta dependencia económica que el sector metalmecánico provincial tiene de la industria automotriz/autopartista”. En el primer cuatrimestre del 2015, las exportaciones metalúrgicas (US$ 941 millones) disminuyeron -21,4% interanual, según Adimra.
La caída del precio del petróleo le sumó un golpe al sector metalúrgico, que sufre además por la merma de la demanda brasileña, en el sector automotriz y en la industria en general. Además de retrasar posibles inversiones en Vaca Muerta, la baja del barril de crudo implicó 3.000 suspensiones en Siderca, una de las empresas de Techint, en la planta de Campana, en el marco de un acuerdo con la UOM que se firmó en abril y sigue hasta octubre.
Según el secretario de Industria del gobierno cordobés, Guillermo Acosta, el grupo “está funcionando bien” y en lo que va del año mantuvieron reuniones con petroleras y proveedoras como Total, YPF, Weatherford, San Antonio Internacional, DLS, TSB, Geopatagonia, Schlumberger y Baker Hughes, entre otras.
El grupo formado por las metalúrgica cordobesas, universidades estatales y el gobierno provincial apunta además al sector minero, para lo que se reunieron con Yamana Gold, Minera Alumbrera, Goldcorp, PAS, Cerro Vanguardia, Patagonia Gold y Mina Aguilar.
Por el freno automotor, metalúrgicos buscan sumarse al sueño petrolero
