El relanzamiento del plan de créditos personales de Anses, presentado en abril de 2019, con el objetivo de impulsar el consumo interno a través del acceso a financiamiento para los sectores más vulnerables, alcanzó el mes pasado una suma récord de 3.003.438 de otorgamientos, a tan solo siete meses de su anuncio.
Según comprobó el Equipo de Investigación de Perfil Educación, se trata de una cifra que va en alza durante todo este año. De ese total de beneficiarios de los créditos otorgados por la Anses fueron: 766.402 para jubilados, 258.864 para pensiones no contributivas, 1.415.198 para titulares de la Asignación Universal por Hijo (AUH) y 562.974 para asignaciones familiares, que corresponden a trabajadores en relación de dependencia.
La situación de los jubilados es alarmante: además de los que ya recibieron el préstamo, un total de 1.112.610 abuelos sacaron turnos para acceder al financiamiento en los meses siguientes. El fondo destinado a la iniciativa es de $124.000 millones y hasta este mes se desembolsaron $80.000 millones.
A través de este sistema personas de la tercera edad, pueden pedir desde $20 mil hasta $200 mil, a ser devueltos en 24,36, 48 o 60 cuotas. Si eligen tomar por ejemplo $80.000 a reintegrar en dos años, alcanzarán cuotas de $5.235,43, a una tasa nominal anual (TNA) de 42%. Se debe recordar que actualmente una jubilación mínima alcanza los $12.937,22, lo que representa más de la tercera parte del ingreso.
Los titulares de la AUH, por su parte, pueden solicitar hasta $12.000 en 24 o 36 cuotas con un TNA de entre 43 y 48 % y las pensiones no contributivas hasta $70.000, con tasas similares.
"El conflicto social que se viene a futuro es el endeudamiento que tienen los más vulnerables", alertó Daniel Arroyo, diputado nacional de Red x Argentina y ex ministro de Desarrollo Social de la Provincia de Buenos Aires. "El Anses es productor de muchas actividades, entre estas la de brindar créditos, pero en este contexto no pareciera ser la mejor política, ni de cerca", agregó el ex funcionario.
El programa de créditos no es algo novedoso. En su momento, bajo el nombre de Argenta el kirchnerismo había promulgado los préstamos con el propósito de alentar el consumo interno. De hecho, fue en 2012 que en aquel entonces como presidenta Cristina Fernández propuso una tarjeta de compras para los comercios adheridos a la iniciativa y estableció que un 35% del crédito pudiese ser depositado en la cuenta del beneficiario, como efectivo disponible.
"Los créditos se sacan única y exclusivamente para pagar deudas, con intereses que rondan entre 48% y un 50%, cuando al Estado provincial se le está prestando a un 12%. Hay jubilados que les vino $9000 de luz y que están cobrando $4000 de jubilación, por haber sacado el préstamo. El Anses dice que no se le puede descontar más del 30% de los haberes pero, como esa plata no les alcanza, sacan préstamos de otras financieras que le descuentan directamente de sus cajas de ahorro”, señala Mirta Tundis, diputada nacional por el Frente Renovador y presidenta de la Comisión de Personas Mayores.
El Equipo de Investigación consultó a las autoridades de Anses sobre el destino final de los créditos pero el organismo señala que desconoce el uso que cada beneficiario termina haciendo del préstamo. Según indica la entidad, solo se toma recaudo de que la cuota que debe pagar el beneficiario por el crédito tomado, no supere el 30% de su ingreso, ya que todos los meses se le descuenta lo correspondiente al crédito.
Sin embargo, mediante una encuesta que la institución realiza a los interesados al momento de efectuar el trámite, sobre 502 casos tomados, arrojó que 47% lo utiliza para la construcción y reformas de hogar, 22% en compras de alimentos e indumentaria, 17% para pago de préstamos, 7% en gastos de salud, 2% para iniciar un emprendimiento y 2% compra productos para el hogar.
"Esto se vende como una medida electoral y se sigue perjudicando a los que menos tienen, como son los adultos mayores, pensionados y a quienes perciben beneficios no contributivos, sobre todo discapacitados que están en la misma situación", señaló Eugenio Semino, abogado defensor de la Tercera Edad y presidente de la Sociedad Iberoamericana de Gerontología (SIG). Además este coincide en que los créditos, en general, se utilizan para saldar deudas.
Por su parte, advierte Osvaldo Bassano, abogado especialista en Derecho del Consumidor y presidente de la Asociación de Defensa de Usuarios y Consumidores (ADDUC), que “Anses está organizando un colosal negocio hacia los más vulnerables. Es otro buitre que le presta a los sectores con menores recursos generándoles situaciones económicas poco beneficiosas a futuro. En la tercera edad hay un abandono del sistema, en vez de préstamos deberían hacerle una actualización del haber jubilatorio”, dice.
Consultado por el Equipo de Investigación sobre el financiamiento del programa de créditos, Emilio Basavilbaso, director ejecutivo del Anses dijo que "es importante aclarar que el financiamiento de los Créditos ANSES no se hace con fondos de este sino del Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS), un fondo que en la ley que le dio origen contemplaba este destino".
Por su parte, respecto del endeudamiento de este segmento de población, el funcionario aclara que "ANSES no promueve que se endeuden" y agregó que se "ofrece una alternativa con tasas de mercado para una población que no es atendida por el sistema financiero y que ante la necesidad recurre a prestamistas que cobran tasas abusivas. La prueba más cabal de que se ha mejorado las condiciones de endeudamiento de esa población es que muchos tomaron el crédito de Anses para cancelar préstamos que habían tomado con tasas de interés de tres dígitos".
La situación se vuelve compleja porque muchos beneficiarios que tomaron los créditos de Anses y perciben el descuento de la cuota del préstamo, ven reducidos sus haberes y no les alcanza para cubrir gastos corrientes como el alquiler, los servicios, la salud y alimentos, entonces lo que hacen es ir a sacar otros créditos a prestadoras zonales que les aplican tasas elevadas. De este modo, sufren un embargo constante de su sueldo.
El Equipo de Investigación de Perfil Educación es dirigido por Rodrigo Lloret y lo integran los mejores periodistas egresados del Posgrado en Periodismo de Investigación de Editorial Perfil.