Un nuevo ataque en Irak se produjo esta mañana con la explosión de dos coches bomba en un mercado de Bagdad, cuando los musulmanes habían terminado el ayuno diario del mes del Ramadán.
Los estallidos provocaron la muerte de 13 personas y dejaron un saldo provisorio de más de 40 heridos, informó hoy la policía iraquí.
Esta nueva baja hace llegar a 2.742 el número de soldados estadounidenses y personal asimilado, muertos en Irak desde marzo de 2003, según un conteo de la agencia AFP sobre la base de cifras del Pentágono.
En tanto, el ex presidente iraquí Saddam Hussein fue expulsado hoy del tribunal de Bagdad donde es juzgado por genocidio contra las poblaciones kurdas, según los periodistas en el lugar.
Cuando el juez Mohamed al Oreibi al Jalifa pidió que cerrasen el micrófono de Saddam Hussein se produjo un altercado y el magistrado ordenó la expulsión del ex mandatario y decidió clausurar la audiencia del día.
Ayer se conoció que hombres armados que vestían uniformes de policía mataron al hermano del vicepresidente sunita de Irak, Tareq al-Hashemi, a última hora del domingo en el norte de Bagdad.
Amer al-Hashemi, destacado general del ejército iraquí, estaba en su casa de Sulaikh cuando unos hombres armados irrumpieron en la casa y lo mataron.