Kirkuk, Irak.- La violencia se cobró al menos 23 víctimas en Irak este lunes, víspera del cuarto aniversario de la invasión del país, cuyos habitantes son cada vez más pesimistas sobre su futuro.
Al menos 15 de ellas murieron y 37 resultaron heridas en tres atentados con coche bomba y un disparo de mortero en un lapso de 35 minutos en la ciudad iraquí de Kirkuk (norte), informó una fuente policial.
Un primer coche bomba que estalló hacia las 13H00 locales (10H00 GMT) en el centro de la ciudad, en un sector que incluye una mezquita sunita, una mezquita chiita y una comisaría, mató a 10 personas. Diez coches ardieron y una veintena de comercios sufrieron importantes daños materiales, según la policía.
Poco después, otro coche bomba estalló al paso de una patrulla de policía cerca del mercado de Ras Domiz, en el sur de la ciudad. Cinco personas murieron, cuatro de ellas policías. A continuación, un obús de mortero cayó cerca de un puesto de la seguridad civil e hirió a una persona en el centro de la ciudad.
En Bagdad, donde un plan contra la inseguridad estadounidense e iraquí está en marcha desde hace más de un mes, al menos cinco personas murieron y 15 resultaron heridas en un atentado con bomba cerca de la mezquita chiita Hussein Abu Ruh, en el mercado de Chorja. Al sur de Bagdad, en la ciudad de Hilla, tres personas perecieron y cuatro resultaron heridas por hombres que dispararon al azar.
Pero el primer ministro iraquí, Nuri Al Maliki, declaró a la cadena ITV que "la violencia religiosa ha terminado (...) gracias al proceso de reconciliación nacional y a la capacidad de las fuerzas de seguridad de detener a los que provocan la violencia religiosa".
Según la página en internet Iraq Body Count, cerca de 60.000 civiles - una cifra mínima - murieron en los últimos cuatro años, mientras que los estadounidenses y sus aliados perdieron unos 3.500 soldados, de ellos 3.220 estadounidenses, desde la invasión norteamericana del 20 de marzo de 2003.
Cuatro años más tarde y a pesar de los múltiples planes de estabilización, los iraquíes cada vez se manifiestan más pesimistas sobre su futuro y su apoyo a la coalición está cayendo, según una encuesta de la BBC, la cadena de televisión estaodunidense ABC News y la alemana ARD y el diario USA Today.
Según esta encuesta, hecha a 2.000 personas en las 18 provincias entre finales de febrero y comienzos de marzo, sólo el 39% de los iraquíes interrogados cree que su vida ha mejorado. Algo más de un cuarto dice sentirse seguro en su barrio. Más del 75% de los iraquíes estima que vive en condiciones precarias.
Se registra igualmente una baja del 14% en el apoyo a la democracia y un aumento del 8% en favor de un hombre fuerte y de un Estado islámico. En 2005, otra encuesta más optimista estimaba al 71% de los iraquíes satisfechos con su vida. Hoy, el 53% de los iraquíes están descontentos con la gestión del gobierno iraquí, mientras que el 82% declara haber perdido la confianza en las tropas extranjeras. La única nota optimista es el 56% de los sondeos no creen que Irak esté en guerra civil y el 58% se declara favorable al mantenimiento de un país unificado.