El líder de Al Qaeda, Ayman Al Zawahri, conmemoró ayer el aniversario de los ataques del 11 de septiembre de 2001, instando a los musulmanes a perpetrar ataques dentro de los Estados Unidos. En un mensaje de audio divulgado dos días después del 11S, el sucesor de Osama bin Laden dijo que el país gobernado por Barack Obama no es una “potencia mítica” y que los muyahidines pueden vencerlo con ataques “en su propio territorio”, propiciando ataques de “lobos solitarios” u operaciones a gran escala.
El cirujano egipcio utilizó el aniversario para alegar que Washington puede ser vencido si se usa como blanco su economía. “Debemos hacer sangrar a Estados Unidos económicamente al motivarlo para que continúe con el gran gasto en seguridad. Estados Unidos no es una potencia mítica, y los estadounidenses, después de todo, son humanos que pueden ser derrotados, caerse y ser castigados”, disparó el jefe terrorista.
Al Zawahri, que se cree que se oculta en la región fronteriza entre Pakistán y Afganistán, dijo que los seguidores de Al Qaeda deben realizar ataques pequeños o un “ataque grande” contra Estados Unidos, similar a los ataques del 11 de septiembre en Nueva York y en Washington, dejando a Estados Unidos en “un estado de tensión” sobre cuándo y dónde será el próximo ataque.
Además, se refirió a la actual turbulencia que estremece al mundo árabe. En relación con la lucha de los rebeldes sirios contra el régimen de Bashar al Assad, recomendó a los islamistas que luchan en la guerra civil a no “comprometerse” con facciones más seculares o moderadas. Dentro de las filas de la oposición siria, hay células de Al Qaeda que combaten contra las fuerzas leales a Al Assad.
La autenticidad del mensaje aún no fue confirmada independientemente, pero fue colocado en una página de internet usada habitualmente por la red terrorista.
Al Zawahiri instó al mundo islámico a “abandonar el dólar y reemplazarlo con una moneda de otro país” que no haya incursionado militarmente en el mundo árabe. “Ya ganamos la guerra en Somalia, en Yemen, en Irak y en Afganistán. Por lo tanto debemos seguir esta guerra en su territorio”, agregó el jefe islamista.
Su último mensaje había sido el 31 de julio, cuando cuestionó el trato que reciben los prisioneros de la base militar de Guantánamo.
El mes pasado, Estados Unidos cerró 22 embajadas y consulados en varios países del mundo árabe por una amenaza “significativa” de ataque terrorista, descubierta gracias a la interceptación de comunicaciones entre miembros de alto rango de Al Qaeda.
“Es una amenaza significativa y estamos reaccionando ante ella”, había dicho el jefe del Estado Mayor Conjunto, el general Martin Dempsey. También es una amenaza “más específica” que otras anteriores y tiene que ver con un potencial ataque “a Occidente, no sólo a intereses estadounidenses”, había precisado Dempsey.
Desde la muerte de Bin Laden, la red terrorista ha buscado generar impacto con sus amenazas contra Occidente.