Argentina pedirá el lunes en la Corte Penal Internacional de La Haya la detención de Nicolás Maduro y de otros líderes del régimen venezolano a los que acusa de crímenes de lesa humanidad.
En un documento titulado “Orden de detención contra Maduro y otros cabecillas del régimen venezolano: exhortación al Fiscal de la Corte Penal Internacional”, publicado ayer por la tarde, el Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto, afirma que con “los hechos ocurridos con posterioridad a los comicios presidenciales del 28 de julio” y “ante el agravamiento de la situación en la República Bolivariana”, hay elementos suficientes para considerar la “detención contra Nicolás Maduro”, por “la comisión de nuevos hechos que pueden ser considerados delitos de lesa humanidad”.
La cancillería argentina, por lo tanto, “exhorta al Fiscal de la Corte Penal Internacional que solicite a la Sala de Cuestiones Preliminares” dichas órdenes de detención.
El informe refiere a las elecciones presidenciales en las que Nicolás Maduro se proclamó ganador, mientras la oposición, organismos internacionales y líderes del mundo cuestionaron la legitimidad de los resultados oficiales que dejaron en segundo lugar a Edmundo González Urrutia.
El documento oficial publicado por el ministerio adelanta que “en la nota del Gobierno argentino que será presentada a la Fiscalía el lunes próximo” se explica que “la evidencia recogida en el curso de las investigaciones que lleva adelante la Fiscalía de la Corte Penal Internacional (“Situation in the Bolivarian Republic of Venezuela I”)” tiene suficiente peso para proceder con las detenciones.
“Pedimos formalmente a la Corte Penal Internacional la detención del dictador Maduro”, anunció en sus redes sociales la canciller Diana Mondino, al mismo tiempo que se publicaba el comunicado. Horas antes había publicado: “Entre varios ministerios implementamos un régimen especial para regularizar la situación migratoria de venezolanos y facilitar su entrada al país. Con acciones y no retórica, ratificamos nuestro compromiso de recibir a quienes están escapando de dictaduras y busquen acá libertad”. El presidente Javier Milei la retuiteó.
La Argentina denunció el mismo día de las elecciones, que Nicolás Maduro había presentó resultados falsos. “Consideramos que ha sido un fraude por parte del dictador Maduro”, dijo en aquel momento el vocero presidencial, Manuel Adorni. “Argentina exige total transparencia en el recuento de votos. No vamos a convalidar ningún resultado sin el respaldo de los veedores internacionales que no sean títeres del régimen chavista”, agregó.
Maduro, con el respaldo del Consejo Nacional Electoral de Venezuela, dominado por el c havismo, anunció su triunfo con el 52% de los votos. El mundo quedó a la espera de las actas electorales que no fueron presentadas hasta hoy. La oposición, liderada por María Corina Machado, con González Urrutia como candidato, realizó su propio conteo, que dio a este último como ganador con amplia ventaja, y que fue acusado de “terrorismo” y se ordenó su captura.
Días atrás, Javier Milei, y Maduro tuvieron intercambios poco amistosos. Milei calificó al venezolano de “criminal”, durante el Foro Madrid que se realizó en Buenos Aires, y dijo: “Adelantan la Navidad a octubre para tapar que cometieron el fraude electoral más elevado de la historia y ahora están metiendo preso a quién ganó las elecciones mientras que el mundo libre se queda cruzado de brazos”.
Maduro, que tomó la decisión de adelantar las fiestas, lo llamó “imbécil” y respondió: “Él le está amargando la vida y las navidades a Argentina y se siente amargado porque el pueblo de Venezuela arranca la rumba el 1 de octubre”.