Pavia - De visita en la ciudad lombarda de Pavia, al norte de Italia, el papa Benedicto XVI concluyó este domingo una misa con un llamado a los jóvenes a estudiar su libro recién publicado, Jesús de Nazaret, lanzado al mercado hace tan sólo 5 días.
Aunque el Sumo Pontífice adrmitió que la lectura del libro es "un poco penosa para los más jóvenes", señaló que está hecho para "acompañar el camino de fe de las nuevas generaciones".
El libro de Benedicto XVI sobre Jesús llegó a las librerías el 16 de abril, en italiano, alemán y polaco, en coincidencia con el cumpleaños del Pontífice. El día de su lanzamiento se vendieron 50.000 ejemplares, lo que llevó a la editorial Rizzoli --que hizo una primera tirada de 350.000-- a encargar una segunda edición.
Antes de escribir Jesús de Nazaret, Benedicto XVI trabajó en una versión para el gran público del catequismo de la Iglesia Católica, que a menudo recomienda leer en sus mensajes.
El Papa recibió una afectuosa acogida de los habitantes de Pavia, donde llegó para una visita pastoral y para rezar en la tumba del "padre de la Iglesia", San Agustín. Propuso como ejemplo para los jóvenes de hoy en día a este santo del siglo V, que empezó a vivir como los hombres de su época, "profundamente condicionado por las costumbres y pasiones dominantes por aquel entonces" antes de entrar en un "largo camino de conversión".
Benedicto XVI, quien se convirtió en Papa el 19 de abril de 2005 a los 78 años, también habló ampliamente del momento en que San Agustín tuvo que abandonar el estudio para hacerse predicador y obispo y "traducir sus conocimientos y pensamientos sublimes al lenguaje de la gente sencilla de su ciudad".
"La gran aventura filosófica de toda una vida con la que él había soñado quedó sin escribir" pero "en su lugar hubo algo más precioso, el Evangelio traducido al lenguaje de la vida cotidiana", comentó el Papa que pareció establecer un paralelismo entre la vida del santo y la suya.
Fuente: AFP