Según el comandante talibán Mohamed Amin, los civiles europeos serán los nuevos blancos de los ataques de la milicia armada en represalia por la invasión a Afganistán, en 2001.
En una entrevista con la cadena británica Sky News, Amin afirmó que las milicias talibán "aumentaron sus armamentos y están listas para vengarse de los invasores extranjeros".
El comandante sostuvo que "es aceptable asesinar civiles en Europa porque estas personas fueron las que votaron a sus gobiernos".
"Ellos vinieron a nuestros hogares y atacaron a nuestras mujeres y niños", agregó.
En su encendido discurso, Amin denunció que los civiles de los países europeos "estuvieron detrás de la invasión a Afganistán". "No tendremos piedad con ellos, los asesinaremos y nos reiremos sobre sus cuerpos, así como ellos nos matan y se ríen de nosotros", insistió.
Amin dijo a Sky News que los talibanes están inspirándose en las tácticas de grupos insurgentes iraquíes, que utilizan bombas de control remoto, minas terrestres y atacantes suicidas, métodos a los que definió como "las mejores tácticas para enfrentar las armas convencionales" de las fuerzas multinacionales.
El comandante talibán precisó, por otro lado, que las milicias afganas están refugiándose en Pakistán, donde reciben ayuda de personas locales que simpatizan con su causa.
Tropas de los Estados Unidos y Gran Bretaña invadieron en 2001 a Afganistán, tras lo cual la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) desplegó unos 31 mil soldados en las Fuerzas Internacionales de Seguridad y Asistencia (ISAF).
Según el gobierno estadounidense del presidente George W. Bush, los talibanes ayudaron durante años al saudita Osama Bin Laden y a su grupo Al-Qaeda, al que la Casa Blanca le atribuye los atentados del 11 de septiembre de 2001 en Estados Unidos.