El gobierno de Colombia salió este lunes a cuestionar abiertamente el frustrado operativo de liberación de secuestrados de las FARC, al afirmar que "no tolerará más" comisiones humanitarias y considerar que Venezuela "debería pedirle explicaciones a las FARC por su engaño".
Para el canciller Fernando Araújo, las delegaciones internacionales llegadas a Colombia estuvieron "conformadas por personas que no conocen la situación colombiana ni a las FARC", lo que los llevó a "atacar al Gobierno y a defender a la guerrilla", según dijo al diario colombiano El Tiempo.
"El resultado de esta gestión fue malo", agregó el jefe de la diplomacia colombiana, y lamentó que muchas personas se dejaron engañar "y todavía insisten en comentarios acerca de intereses equivocados del gobierno colombiano".
La del canciller fue la primera voz oficialista después de que el viernes se confirmara que el pequeño Emmanuel, hijo de la ex candidata Clara Rojas y supuesto rehén a ser liberado por las FARC, estaba en realidad en un instituto de bienestar social de Bogotá.
Araújo, además, volvió a marcar distancia con Venezuela al responder el comunicado de cuatro puntos con el que el gobierno de Hugo Chávez celebró el fin de semana la noticia sobre la identificación de Emmanuel.
El mismo Chávez, durante su ciclo Aló Presidente, remarcó este domingo que "más allá de cualquier versión, enfoque, o diatriba política, lo importante es que Emmanuel esté libre".
Por esta afirmación y por los duros cuestionamientos que su colega venezolano, Nicolás Maduro, le hizo en los últimos días, Araújo criticó la actitud de Venezuela, que está "mirando para el lado que no es".
"Más bien deberían pedirles explicaciones a las FARC, que los ha engañado y que han ofrecido la liberación de unos secuestrados e incumplieron su oferta", dijo Araújo.
Un rato antes, el vicepresidente Francisco Santos había acusado a la guerrilla de mentirosa y advertido que la capacidad de los rebeldes para manipular y cometer atrocidades no tiene límites.
En declaraciones formuladas a la prensa en la ciudad costera de Cartagena, publicadas por el diario El Tiempo, Santos insistió en que las FARC "se burlan y mienten, y le mienten desde al presidente Chávez para arriba".
Agregó que la capacidad de los rebeldes para "cometer atrocidades tampoco tiene límites", en alusión a que los guerrilleros no cumplieron con la anunciada liberación de Clara Rojas, Emmanuel y la ex legisladora Consuelo González.
La operación de liberación había sido planificada por Chávez, que llamó para eso a delegados de siete países, pero las FARC abortaron la operación con el argumento de que había en la zona maniobras militares que ponían en riesgo la liberación.
Las FARC habían anunciado la puesta en libertad de los tres rehenes "como gesto de desagravio" al presidente Chávez y a la senadora colombiana Piedad Córdoba, separados de las gestiones para un canje humanitario por el mandatario Alvaro Uribe, que las había autorizado un mes antes.
El propio Uribe aseguró, el 31 de diciembre, que las FARC no liberaban a los cautivos porque no tenían a Emmanuel, que estaría bajo la protección de un organismo gubernamental desde 2005.
En la misma línea que Araújo y Santos, el ministro del Interior y Justicia, Carlos Holguin, afirmó que quedó demostrado que "no se puede negociar ni con los tramposos ni con los mentirosos".
En declaraciones a Caracol Radio, que consignaron varios portales de diarios colombianos, Holguín confirmó que lo único que hoy queda pendiente es que la comunidad internacional le exijan a las FARC que liberen a todos los secuestrados, porque ya no hay confianza para negociar.
"Por eso ya no más acuerdos, no más misiones humanitarias para que las FARC juegue con todos, con la comunidad internacional", sentenció el ministro, que se preguntó "¿para qué ponernos a las manos de las FARC".
Para Holguín, a la organización "ya no le queda ni territorio, ni capacidad operativa, salvo algunos incidentes terroristas que adelanten en su afán demencial de hacer daño".
Fuente: Télam.