Paris - A pesar de que las encuestas dan al candidato conservador Nicolás Sarkozy como el favorito para suceder a Jacques Chirac, la publicación hoy de un supuesto pacto entre ambos para evitar que el presidente de Francia sea citado por la Justicia cuando concluya su mandato provocó un aluvión de protestas.
El semanario satírico Le Canard Enchainé, considerado por muchos como el único independiente de la prensa francesa, afirmó que existe un acuerdo secreto entre Sarkozy y Chirac para evitar que el mandatario sea objeto de investigaciones judiciales una vez concluido su período, lo que fue desmentido en el Eliseo y calificado de "sin fundamentos" por el candidato de la UMP.
Sarkozy y Chirac mantienen una tensa relación desde hace más de 10 años pese a integrar la misma coalición política. No obstante, el 21 de marzo el presidente galo brindo un mesurado apoyo al candidato de la UMP.
Las informaciones publicadas en el Canard Enchainé hicieron que el partido socialista pidiera a cada candidato que " se comprometa, si es elegido, a no enterrar, obstaculizar o declarar una amnistía sobre un caso judicial que está sin cerrar".
Los dos últimos años de gobierno resultaron tumultuosos para Chirac. Hoy, a los 74 años, el mandatario goza de una inesperada buena imagen pública entre los franceses que recuerdan sus mejores épocas.
En marzo, el Canard Enchainé había denunciado que tanto Sarkozy, como la pareja de socialistas Ségolene Royal y Francois Hollande se favorecieron de sus influencias para lograr una rebaja considerable en la compra de sus departamentos.
Cada miércoles Le Canard Enchainé causa revuelo con sus denuncias y por eso es considerado el único medio independiente de investigación en Francia.
Sin publicidad para "no recibir presiones" de sus auspiciantes y en un modesto formato de diario en blanco y negro con solo ocho hojas, en la recta final de la campaña Le Canard Enchainé agota sus ediciones cada semana.