Ciccio, un pastor alemán de 14 años, espera todas las tardes el regreso de su dueña María, fallecida hace ya dos meses, sentado en la explanada de la Iglesia de San Donaci, provincia de Bríndisi, sur de Italia, publicó hoy la prensa local.
Ciccio todos los días acompañaba a la anciana a la Iglesia y luego regresaba a casa con ella. El perro no dejó de ir ni un día a la Iglesia desde que acompañó a su dueña a las exequias. Tras la muerte de la anciana, Ciccio permanecía con paciencia en la puerta de la iglesia pero luego que el párroco le permitió entrar participa en matrimonios, bautismos y ceremonias fúnebres.
Ahora fue adoptado por toda la comunidad de San Donaci, y en particular por el párroco Donato Panna, que le permite permanecer en la Iglesia durante la misa y le arregló un espacio durante el resto de la jornada. El animal no olvidó sus costumbre y espera que la anciana aparezca en la Iglesia. Concluida la ceremonia, se queda afuera, en un pequeño espacio cubierto de la Iglesia, donde fieles y conocidos de María le llevan alimentos y agua.
Los fieles están contribuyendo a su cuidado. Pero algunos piensan que quizás el perro necesite del afecto de otra familia y a través de Facebook publicaron su historia y sus fotos.