Aunque suene increíble, Bélgica estuvo 535 días sin primer ministro. Hoy finalmente los diferentes sectores políticos del país llegaron a un acuerdo y nombraron al socialista Elio Di Rupo.
De origen italiano, Di Rupo pertenece al sector francófono de Bélgica, precisó el sitio digital del diario Le Soir, que responde a la comunidad de ese origen.
Según Le Soir, los seis partidos llamados a formar la nueva coalición federal alcanzaron un entendimiento.
El acuerdo, vertido en un documento programático de 185 páginas, será examinado en sus detalles por expertos de los partidos en cuestión y los negociadores. De no existir obstáculos de último minuto, Bélgica tendrá un gobierno tras un año y medio de las elecciones del 13 de junio de 2010.
Fue finalmente la crisis de la deuda en la zona euro que obligó a las dos grandes comunidades a llegar a un acuerdo. La agencia de calificación financiera Standard & Poor's rebajó el viernes la nota crediticia de Bélgica obligando a los partidos, que se oponían sobre temas presupuestarios, a hallar un compromiso, reportó la agencia AFP.
Después de los congresos de los partidos durante el fin de semana, el juramento del nuevo gobierno y la confianza parlamentaria son esperados para comienzos de la próxima semana, informó la agencia ANSA.
Di Rupo será el primer ministro francófono desde 1974.
No se conocen aún los nombres de otros potenciales ministros que deberían ser, como máximo, quince.
En 2008, el pequeño país europeo había salido de una crisis política similar, que lo había dejado acéfalo durante nueve meses.