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Desde el Vaticano
Francisco destituyó al nuncio apostólico en República Dominicana, el polaco Jozef Wesolowski, luego de que se confirmara la existencia de una investigación en curso sobre acusaciones de pedofilia que enfrenta el prelado. La Santa Sede confirmó la remoción de Wesolowski, cuya misión en República Dominicana se inició en enero de 2008 por designación del papa Benedicto XVI.
En tanto, el Vaticano abrió una investigación paralela a la que instruye la Justicia argentina sobre el sacerdote argentino Justo José Ilarraz, acusado por más de cincuenta casos de abuso sexual contra menores de edad entre 1984 y 1992, cuando era responsable del Seminario Menor de Paraná. Si bien el Estado del Vaticano ya había encargado otras averiguaciones respecto de denuncias similares, se trata de la primera investigación ordenada por el papa Francisco sobre un miembro de la Iglesia argentina.
La Santa Sede instruyó al vicario de justicia del tribunal interdiocesano de Santa Fe, el sacerdote Alejandro Bovero, para que inicie las actuaciones eclesiásticas correspondientes. Bovero dijo a la prensa que tras la investigación, que incluye testimonios de presuntas víctimas de Ilarraz, remitirá los resultados a las autoridades judiciales vaticanas para su evaluación y sentencia definitiva.
“Esta causa viene derivada directamente de la Santa Sede. No es un caso más del tribunal interdiocesano, que nosotros juzgamos. Además, esto no es un juicio sino una instrucción previa”, precisó el cura. “Las decisiones las toma la Santa Sede y después las ejecuta a través del obispo de cada lugar”, agregó. Bovero explicitó que lo investigado “está dentro de los delitos graves, bien consignados en el Código de Derecho Canónico”.