Un ex periodista del Washington Post, coganador de un premio Pulitzer por su cobertura de la masacre de 2007 de Virginia Tech, reveló que reside ilegalmente en Estados Unidos desde hace casi dos décadas.
José Antonio Vargas, de 30 años y originario de Filipinas, anunció en un artículo publicado este miércoles por la revista del diario New York Times, que vive sin documentación legal en Estados Unidos desde que llegó a este país en 1993, un dato que hasta ahora mantenía oculto.
Si lo reveló ahora, dijo, es con la intención de apoyar al "DREAM Act", una iniciativa legislativa que permite a jóvenes estudiantes inmigrantes tramitar la nacionalidad estadounidense.
Vargas relató que en 1993 su madre lo embarcó en un avión desde su Filipinas natal hacia Estados Unidos, cuando él tenía apenas 12 años, con el propósito de que viviera con sus abuelas en la zona de San Francisco. El joven descubrió que se hallaba de manera ilegal en Estados Unidos a los 16 años, cuando fue a tramitar su licencia de conducir y un funcionario le dijo que se fuera porque sus documentos eran falsos.
"Desde entonces decidí que no le daría a nadie razones para dudar de que yo no era estadounidense", dijo. "En los 14 años siguientesme gradué y construí una carrera como periodista, que me permitió entrevistar a algunos de los personajes más famosos de este país", indicó, y agregó que pudo "vivir el sueño americano".
"Pero soy todavía un inmigrante indocumentado. Y esto quiere decir que todos los días siento temor de ser descubierto y que debo ocultar mi condición, incluso a mis amigos más cercanos", señaló.
"Ya no quiero esa vida", concluyó, al tiempo que admitió que ignora cuáles serán las consecuencias legales de haber revelado su secreto. "Me estoy asesorando al respecto", comentó.
En las últimas horas, el senador republicano John McCain había desatado una ola de críticas al afirmar que hay "pruebas sustanciales'' de que los "inmigrantes ilegales son responsables por algunos de los incendios forestales ocurridos en Arizona".
Las declaraciones tanto de Vargas como de McCain, se producen luego de que los líderes demócratas del Senado presentaran esta semana una reforma migratoria integral que, se espera, mejoraría la "productividad económica y la seguridad nacional al legalizar a once millones de inmigrantes indocumentados".