El anunciado diálogo telefónico entre los cancilleres de Uruguay y Gran Bretaña generó gran expectativa y finalmente tuvo lugar esta tarde. Según informó la prensa uruguaya, el ministro de Relaciones Exteriores de Gran Bretaña, William Hague, reclamó en esa charla que "los buques con bandera británica deben seguir teniendo acceso a los puertos de Uruguay".
La embajada británica en Uruguay explicó mediante un comunicado que el contacto se produjo "para conversar acerca del camino a seguir", tras la decisión de Uruguay de impedir que barcos con bandera de Islas Malvinas ingresen a las terminales portuarias del país, informó el diario uruguayo El País.
El comunicado sostiene que la conversación "fue cordial y constructiva", y subraya el gobierno británico tiene "la esperanza de una solución satisfactoria".
Desde el lado uruguayo, la reacción fue distinta.
Según publica el diario El Observador, el canciller Luis Almagro aseguró: "Dejamos clara la decisión adoptada por Uruguay y dijimos que es consecuente con el posicionamiento histórico del país sobre las Malvinas".
Además, señaló: "Reconocer la bandera de las Falkland sería reconocer la jurisdicción y la soberanía británica".