Golpeada por la crisis económica mundial, España anunció esta jornada de manera oficial que entró en recesión. De esta manera, el Estado europeo se sumó al club de países del viejo continente que confirmaron la desaceleración de sus economías.
El Banco de España informó que en el último trimestre de 2008 la economía española encadenó su segundo crecimiento negativo. De octubre a diciembre, el PIB español se contrajo un 1,1% frente al trimestre anterior, en el que ya había habido un retroceso del 0,2%.
La baja del último trimestre de 2008 estuvo marcado por una fuerte caída de la demanda interna (consumo e inversión), del 2,4%. En el conjunto del año pasado, España creció un 1,1%, frente al 3,7% que había crecido en 2007.
Se trata de una "sustancial desaceleración", según el Banco de España. La estimación del Banco de España será confirmada en febrero por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Las previsiones del gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero apuntan a una recesión que se traducirá en un decrecimiento del PBI del 1,6% este año. La Comisión Europea apunta a una contracción mayor, del 2%.
Fuente: DPA