El secretario de Seguridad Pública de Ciudad de México, Omar García Harfuch, sobrevivió este viernes a un atentado de decenas de sicarios en un elegante barrio de la zona norte de la capital, en el que murieron tres personas, y culpó a un poderoso cartel del narcotráfico.
El funcionario, quien recibió tres balazos y está fuera de peligro, responsabilizó al Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG), uno de los más sanguinarios y con mayor presencia operativa en México, según autoridades.
“Esta mañana fuimos cobardemente atacados por el CJNG, dos compañeros y amigos míos perdieron la vida, tengo tres impactos de bala y varias esquirlas”, escribió García Harfuch, de 38 años, en su cuenta de Twitter.
“Nuestra nación tiene que continuar haciéndole frente a la cobarde delincuencia organizada. Continuaremos trabajando”, añadió el secretario, en el cargo desde octubre de 2019.
Sin señalar a un grupo en particular, el presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó que el atentado tiene que ver, “sin duda”, con el trabajo de las instituciones de seguridad en la capital y todo el país.
Cámaras de seguridad captaron el momento en que un camión se estaciona en medio del céntrico Paseo de la Reforma, en la lujosa zona de Lomas de Chapultepec, y de su interior baja una veintena de individuos con armas largas para la emboscada.
Otros se quedan arriba del vehículo, desde donde se organizan y apuntan aparentemente a la espera de García Harfuch, según las imágenes difundidas por la cadena Televisa.
La alcaldesa de la capital, Claudia Sheinbaum, anunció la detención de 12 sospechosos y sostuvo que en el ataque se usó armamento de guerra, calibre 50, capaz de penetrar el blindado más grueso de los vehículos de la policía.
Cartel. El atentado tuvo lugar a semana y media del asesinato de un juez federal y su esposa en la occidental ciudad de Colima, también adjudicado por las autoridades al CJNG, convertido en la banda más poderosa del país tras la caída en desgracia del jefe del Cartel de Sinaloa, Joaquín “el Chapo” Guzmán.
Guzmán fue extraditado en enero de 2017 a Estados Unidos y hace un año fue condenado a diez cadenas perpetuas por un tribunal de Nueva York.
El juez asesinado, Uriel Villegas, tuvo a cargo cuatro procesos penales contra Rubén Oseguera, “el Menchito”, hijo del jefe del CJNG apodado “el Mencho”, pero se especula que el asesinato fue motivado por la orden que dio en marzo de 2018 de cambiarlo de prisión.
Hace unos días, en una reunión del gabinete de Seguridad Nacional, se supo de la existencia de la grabación de una llamada telefónica entre miembros del CJNG, interceptada por el Centro Nacional de Inteligencia (CNI), sobre un inminente atentado contra un funcionario de alto perfil del gobierno del presidente López Obrador.
Se creía que los posibles blancos serían el canciller Marcelo Ebrard, que firmó la extradición a Estados Unidos del Menchito, el 20 de febrero pasado, o el director de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), Santiago Nieto, que ha congelado fondos de la organización.