Tres bombas que datan de la Segunda Guerra Mundial y que pesan 500 kilogramos cada una, fueron desactivadas ayer en la ciudad de Hannover, en el norte de Alemania, en una de las mayores operaciones de evacuación de la población desde 1945 en ese país y que involucró a 22.000 personas.
La operación estaba prevista luego de haber descubierto los tres artefactos explosivos -de origen estadounidense y británico- durante unas obras de construcción. Los habitantes de varios barrios de Hannover debieron abandonar su domicilio para ser trasladados a gimnasios y escuelas donde fueron acogidos, según precisaron los bomberos de la ciudad.
En tanto, las autoridades decidieron proceder a una gran evacuación a raíz del posible peligro de que las bombas, lanzadas en 1943, contuvieran componentes químicos aún activos, indicaron los bomberos.