Manila.- El director de guardería que mantuvo secuestrados a 32 niños y dos profesores que se trasladaban en un autobús en Manila, finalmente liberó a los rehenes y se rindió.
"Dejará que los rehenes se marchen y se rendirá", había adelantado un portavoz de la policía, Cipriano Querol, a la televisión local, en referencia a Amando "Jun" Ducat, director de un jardín de infantes de Manila que había secuestrado el autobús escolar.
A cambio, la policía acordó permitir que la prensa cubriera el momento de su rendición. "Accedimos a esa condición. Le aseguramos que estará sano y salvo (...) y que nada le ocurrirá", afirmó Querol.
Un total de 32 niños de cinco años o menos se hallaban a bordo del micro, pero uno de ellos, que tenía fiebre alta, ya había sido liberado.
Horas de tensión. "Tenemos a 32 niños y dos profesores de rehenes. Estamos armados con dos granadas, un (fusil de asalto) Uzi y pistolas del calibre 45", se pudo leer en un cartel colocado sobre el parabrisas del autobus.
Ducat se comunicó con una radio de Manila exigiendo la gratuidad del alojamiento y la educación para un grupo de 145 niños de un centro de atención de día en un barrio desfavorecido de la capital. Esta demanda concierne igualmente a los escolares a bordo del autobús. "Amo a estos niños, es la razón por la que estoy aquí. No voy a desencadenar un tiroteo", aseguró.
Según una profesora a bordo, Lyn Osita, la edad de los niños es igual o inferior a 5 años. El principal protagonista había fletado el vehículo por la mañana para llevar a los niños a una salida educativa a Tagaytay, en el sur de Manila, explicaron los padres a los periodistas.
Por su lado, el senador Alfredo Lim, ex jefe de la policía de la capital, dijo que Ducat ya había hecho hablar de él con actos similares. En el año 1987, hizo prisioneros a dos curas católicos en Manila con falsas granadas. En esa época, se trataba de un litigio inmobiliario. Ducat fue inculpado, pero el procedimiento judicial no tuvo seguimiento.
Se trata asimismo del segundo incidente de este género en Filipinas en menos de dos semanas. El pasado 14 de marzo, la policía abatió a un ex militar para poner fin a una toma de rehenes de 24 horas en un Tribunal de Taguig (este de la capital). El hombre, que había secuestrado a cuatro personas con ayuda de su compañera, comparecía en el tribunal por una demanda de expulsión de su alojamiento presentada por uno de sus rehenes. jvg/cgm/fp/vb Filipinas-secuestro
Fuente: AFP