Peter Frederiksen, de 63 años, es un danés residente en Sudáfrica que fue detenido en septiembre de este año luego que las autoridades localizaran 24 vaginas mutiladas en el freezer de su casa. Hace dos días compareció ante la Justicia para pedir su fianza.
Frederiksen es propietario de una tienda de armas en la localidad sudafricana de Maseru, capital de Lesotho, a dos horas de Bloemfontein. Está acusado de los delitos de asalto sexual e intimidación, hasta que un equipo forense determine si se trata de un asesino en serie.
El hombre fue arrestado luego que su mujer Anna Matseliso Molise, de 28 años, denunciara que la drogó para mutilarle sus partes íntimas. Cuando la policía registró su domicilio hallaron 24 clítoris mutilados en el freezer además de un diario en el que llevaba el recuento desde 2004 de sus mutilaciones, medicamentos anestésicos, equipo quirúrgico y pornografía infantil.
Molise era la testigo clave en la investigación judicial en curso, pero fue baleada en las inmediaciones de su casa el mes pasado. La mujer había tenido dos hijos con Frederiksen.
No trascendió por ahora si las partes íntimas fueron cortadas a las mujeres cuando estaban inconscientes o si fueron previamente asesinadas. Los investigadores sospechan que las víctimas serían oriundas de la zona de Lesotho, donde está ubicado el negocio de Frederiksen.