México - Las autoridades de salud de México se mantienen alertas por una "histeria masiva" que afecta a unas 600 niñas de un internado de religiosas surcoreanas, cuya directora aceptó dar ayuda psicológica externa para tratar el padecimiento que dejó sin caminar a cientos de adolescentes.
"Los médicos que han hecho análisis dicen que es una imitación entre ellas, es psicológico, finalmente lo que nos impresiona mucho, nos impacta mucho, es que sí sufren en no caminar, entonces los padres están espantados, están perdiendo la razón porque están muy enojados y molestos por ver a sus hijas así", se limitó a decir a la agencia AFP Margie Cheong, la religiosa que dirige el colegio.
El fenómeno, que se manifiesta con atrofia muscular y mareos, inició en octubre de 2006 afectando a dos niñas; cuatro meses después ya eran 200 las menores enfermas, a las que se sumaron otras 400 en marzo pasado.
Tras realizarles numerosas pruebas clínicas, médicos del Hospital Infantil de México y de la secretaría de Salud concluyeron que el padecimiento es producto de lo que comúnmente se conoce como "histeria de masas".
El internado "Villa de las niñas", que se ubica en la población de Chalco, en el estado de México (centro), es dirigido por la congregación religiosa de Corea del Sur "Hermanas de María", un grupo católico que aplica una estricta disciplina en la que destacan sólo dos salidas al año para las jóvenes y la prohibición de responder correspondencia.
"Ellas solamente pueden ver a sus padres dos veces al año, (...) en algunas ocasiones se ponen tristes porque pueden recibir cartas pero obviamente ellas no pueden responderlas, hay veces que los padres les ponen alguna noticia mala o que las pone un poco preocupadas", dijo vía telefónica Nelly Montaño, de 19 años, ex alumna y desde hace 18 meses trabajadora de la institución.
La extraña epidemia, que se dio a conocer en la prensa con los testimonios de algunas de las afectadas y de cinco maestros que fueron despedidos, desaparece en cuanto las niñas salen del colegio, lo que ha generado acusaciones de maltrato contra las religiosas.
Esos docentes "estaban hablando que algunas niñas estaban enfermas, están diciendo que es por culpa de las madres que dan comida podrida y agua contaminada, que son falsos, porque ahorita se está controlando mejor que todo lo que comemos está más limpio", se defiende Margie Cheong en un rudimentario español.
Otro factor que ha irritado a las familias de las menores, en su mayoría de escasos recursos económicos, es la utilización de remedios naturistas y de medicina oriental para tratar algunos padecimientos.
Al respecto, una jovencita -actualmente enferma de cáncer- denunció a la cadena Televisa que durante meses un médico coreano, llamado por las religiosas, le quemó su cuello para tratar de eliminar unos nódulos que se le palpaban en la garganta.
"Sí, fue una técnica que tuvimos con unas diez niñas a fin de apoyarles cuando no encontramos otros métodos con los médicos de aquí, para ayudarles con terapia oriental, pero no es para tratarles mal", reconoce Cheong, quien considera que esas menores han sido "utilizadas para atacar a la escuela".
"Pero sí me arrepiento de practicar esto porque la cultura es totalmente diferente", añade.
La responsable de la "Villa de las niñas" detalló que en el colegio hay más de 3.000 menores sanas, en tanto que de las 600 que han enfermado, unas 300 ya abandonaron la institución, lo que les ha servido para recuperarse."Estamos viendo si con un cambio de ambiente pueden mejorar. Las niñas no aceptan que están imitando, inconscientemente imitan y lesionan sus
articulaciones, eso les impide caminar bien", comenta la religiosa coreana quien adelantó que desde el próximo lunes todo el plantel será tratado por psicólogos del ministerio de Salud.