INTERNACIONAL

Histórico: Escocia vota hoy su independencia del Reino Unido

Más de 4,3 millones de electores lo deciden hoy de manera histórica y vinculante. Galería de fotos

Partidario del sí, tras votar en Glasgow.
| AP

Escocia vota este jueves en el referéndum de independencia que decidirá el futuro del Reino Unido tras 300 años de existencia. En un día gris y con niebla baja en Edimburgo y Glasgow, los colegios electorales abrieron a las 6 de la mañana y cerrarán a las 21.

Esta mañana, los partidarios de una y otra posición continuaron de campaña y apuraban sus últimas posibilidades de influir en el resultado. Unos 4,3 millones de residentes en Escocia están llamados a responder "sí" o "no" a la pregunta "¿Cree que Escocia debería ser un Estado independiente?".

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El tema ocupa la portada de la mayoría de los diarios británicos en general y escoceses en particular, con titulares como "El día del destino" (The Scotsman), "Elige bien, Escocia" (Daily Record).

Los resultados totales y definitivos se conocerán a partir de las 5 del viernes y no habrá sondeos a boca de urna, aunque si las diferencias son grandes el desenlace podría estar claro antes. El último sondeo, difundido cuando faltaban sólo 24 horas para la cita, da al "no" una ventaja de cinco puntos. Según la encuesta, realizada por Panelbase con 1.000 personas, el "no" a la independencia obtendría el 50%, el "sí" el 45% y el 5% todavía están indecisos.

Mujeres y ancianos parecen ser los más reticentes a la independencia, mientras que los varones de entre 30 y 60 años son los más proclives, con un grupo especialmente volátil, los más jóvenes, que por primera vez podrán votar a partir de los 16 años.

Escocia, Inglaterra, Gales e Irlanda del Norte integran el "Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte", nombre oficial del Estado con capital en Londres. Gran Bretaña es la parte más importante de ese Estado, la isla que reúne a Escocia, Inglaterra y Gales, y cuya historia, hasta la unión de 1707, estuvo dominada por las batallas y las idas y venidas de los ejércitos de un reino al otro.

El triunfo de la independencia avivaría reivindicaciones similares en lugares europeos como Cataluña, Flandes, el País Vasco o el Veneto, y acabaría, probablemente, con la carrera de David Cameron, el primer ministro británico. Sin embargo, el primer ministro no se arrepiente de haber convocado el referéndum y aseguró que no dimitirá: "mi nombre no está en las papeletas".

El Partido Nacional Escocés (SNP) ya fijó la fecha del 24 de marzo de 2016 (309° aniversario de las Actas de Unión entre Inglaterra y Escocia) para completar el proceso y declarar una secesión que reduciría la superficie del Reino Unido en un tercio.

Escocia sería el primer estado independiente creado en Europa desde la sangrienta desintegración de Yugoslavia (1991-1999) pero se asemejaría más a la partición pactada y pacífica, en 1993, de la entonces Checoslovaquia en dos países, la República Checa y Eslovaquia.

El reparto de bienes en caso de "divorcio" amenaza con ser difícil. Las cuestiones más espinosas son: la libra esterlina, los submarinos nucleares Trident de la base naval de Faslane, cerca de Glasgow, y el petróleo.

Primeros testimonios durante la votación. "He votado 'sí' porque creo que Escocia debería gobernarse a sí misma", explicó en Edimburgo a la AFP Sarah Rowell, de 36 años, administrativa. "Amo a mí país, no quiero verlo arruinado", dijo, sin revelar su voto, Charlotte Farish, una madre de dos hijos de 34 años. Por su parte, una de las celebridades que mayor discreción había guardado sobre el tema, el tenista Andy Murray, parecía haber tomado partido. "¡Gran día para Escocia hoy! La negatividad de la campaña del 'no' en los últimos días cambió totalmente mi visión, ansioso por ver el resultado. ¡Hagámoslo!", escribió en su cuenta de Twitter.

Modificaciones a la bandera. Si Escocia opta por la independencia el jueves, el Reino Unido no sólo cambiaría irremediablemente de aspecto sino quizás también de bandera, la Union Jack, uno de los estandartes más conocidos en el mundo. Diseñada hace más de 200 años, la Union Jack combina los colores de los santos patrones de Inglaterra, Irlanda y Escocia. En caso de independencia escocesa, la cruz blanca diagonal sobre fondo azul podría por ello desaparecer. Habría que escoger una nueva combinación, quizás dar entrada al color verde y rojo de la bandera del País de Gales, que brilla ahora por su ausencia.