Partidarios y opositores de la píldora "del día después" se enfrentaron a gritos hoy frente al Ministerio de Salud de Chile, país donde el Tribunal Constitucional prohibió distribuir el anticonceptivo en el sistema público a menores de 14 años.
Los altercados tuvieron réplicas en regiones, como la austral ciudad de Concepción, donde una docena de personas fueron detenidas tras apoyar la distribución del fármaco, en las afueras de la municipalidad, dirigida por la conservadora alcaldesa y doctora, Jacqueline van Rysselberghe.
En Santiago, el principal conato ocurrió cuando trabajadores de los consultorios del país enfilaron hacia el Ministerio de Salud, hacia donde también marcharon unos 600 jóvenes ligados a universidades y colegios privados de la Iglesia católica, que consideran abortivo el anticonceptivo.
Los trabajadores, que hoy hicieron un paro nacional en rechazo al fallo inapelable del Tribunal Constitucional (TC), acusaron que la resolución es discriminatoria y regresiva, posición apoyada por sectores laicos del gobierno. "La medida del Tribunal Constitucional retrocede 50 años en política de salud pública, particularmente en lo que dice relación con salud sexual y reproductiva. Además viola la igualdad de los ciudadanos ante la ley", reclamó el presidente de los trabajadores de los consultorios, Esteban Maturana.
Por su parte, el vocero de gobierno, Francisco Vidal, dijo que no le gusta la movilización de los trabajadores de la salud. "Si se están solidarizando con el tema yo lo hubiera hecho al revés habría hecho trabajo voluntario, o sea, en vez de ir al paro habría trabajado más horas", opinó.
En Chile, país donde hasta hoy la Iglesia católica incide y lidera la discusión política, está permitido vender en forma privada la llamada "píldora del día después", pero el TC prohibió su entrega en el sistema público a menores de 14 años.
Fuente: DPA