Roma - Más de 47 millones de italianos estaban llamados a votar hoy en unas elecciones legislativas anticipadas en las que deben escoger entre el conservador y magnate de las comunicaciones, el e x primer ministro Silvio Berlusconi, y el líder de centroizquierda, el ex alcalde de Roma Walter Veltroni.
La primera jornada de las elecciones generales en Italia, que concluirán mañana a las 15 hora local (13H00 GMT), se desarrolló en calma, con una tasa de participación del 48%. Los dos principales candidatos al cargo de primer ministro emitieron su voto en sus colegios electorales.
El índice de participación en esta jornada registraba una baja de cerca del 3% a las 19 hora local con respecto a los comicios del 2006, según datos del ministerio del Interior. La tasa fue del 48% respecto al 52,2% registrado a la misma hora en las elecciones legislativas del 2006, un porcentaje alto de todos modos si lo comparamos con otras democracias occidentales.
Los 47 millones de electores podían votar hoy hasta las 22 (hora local) del domingo, y mañana entre las 07 y las 15. Los resultados oficiales se conocerán el martes.
Acompañado por su esposa Flavia y sin corbata, Veltroni fue uno de los primeros dirigentes en ir a votar en la capital italiana, mientras que Berlusconi lo hizo en su bastión de Milán (norte).
"Hoy podemos cambiar el país", escribe el diario La Repubblica, mientras el Corriere della Sera, de mayor circulación en la península, tituló con más discreción: "Elecciones, hora de escoger".
Las últimas encuestas autorizadas publicadas hace 15 días predicen un regreso al poder para un tercer mandato del millonario milanés Berlusconi, de 71 años, que encabeza el nuevo Partido del Pueblo de la Libertad (PDL) aliado con Alianza Nacional (conservador) y la Liga del Norte (regionalista y populista).
Mientras Berlusconi podría obtener sin grandes dificultades la mayoría en la Cámara de Diputados, la incógnita reside en el Senado, donde, en caso de derrota, podría volver a vivirse la pesadilla de un país ingobernable, como ocurrió durante los 20 meses del gobierno de Romano Prodi. Este terminó cayendo en enero al carecer de un número suficiente de senadores, lo que provocó elecciones anticipadas.
Para la Cámara alta, que tiene en Italia el mismo peso que la Cámara de Diputados, la prima de mayoría se otorga al partido ganador con base en cálculos regionales y se decide en unas cuantas regiones claves. Si los partidos más pequeños tienen buenos resultados en esas regiones, las grandes formaciones, el PDL de Berlusconi y el nuevo Partido Demócrata (PD) de Veltroni, podrían perder la prima.
Además de las legislativas, los italianos votarán también en varias ciudades en comicios municipales -como en Roma-, y regionales -como en Sicilia-.
Fuente: AFP