Los candidatos a la presidencia de Estados Unidos Hillary Clinton y Donald Trump aprovecharon ayer hasta el último momento antes del arranque de las elecciones para mostrar su fortaleza política ante enormes multitudes. En sendos actos de campaña se dirigieron a la población para recordarle que el destino del país está en sus manos.
En Filadelfia, la candidata demócrata mostró su fuerza política al estar acompañada en el escenario por el mandatario Barack Obama, su esposa Michelle, su marido Bill Clinton y varios astros de rock, como Lady Gaga, Bruce Springsteen y Jon Bon Jovi. En el acto asistieron 30.000 personas, la mayor multitud reunida por ella en toda su campaña.
El plato fuerte del acto quedó a cargo de Obama, quien emocionó a la gente con un apasionado llamado a defender los avances de sus ocho años de gestión al elegir a Clinton: "Les apuesto que Estados Unidos va a rechazar la política del resentimiento y elegir una política que dice que unidos somos más fuertes. Les apuesto que mañana ustedes van a rechazar el miedo y elegir la esperanza", aseveró el mandatario.
A su turno, la exsecretaria de Estado afirmó: "Como el presidente les ha dicho, la opción es clara en esta elección. La opción entre la división y la unidad, entre una economía que funciona para todos o solo para aquéllos que están en la cima".
Simultáneamente, Trump protagonizó un acto de campaña en Manchester, New Hampshire, un estado donde Obama venció en las elecciones de 2012 aunque en esta ocasión el millonario candidato espera poder convertirlo en territorio republicano. Durante el evento, dio un show el músico Ted Nugent.
El magnate inmobiliario de 70 años tuvo una jornada llena de paradas: un mitin en Carolina del Norte, otro en Pensilvania, New Hampshire, antes de terminar su campaña en Michigan. En sus discursos volvió a usar su incendiaria retórica. "¿Ustedes quieren ver a Estados Unidos siendo conducido por una clase política corrupta, o quieren ver a Estados Unidos siendo conducido, una vez más, por su gente?", planteó Trump a su audiencia. El polémico candidato conservador dijo que su llegada a la Casa Blanca representaría el fin de "años de traición". "Yo estoy con ustedes, y lucharé por ustedes, y juntos venceremos", gritó.