Los habitantes de todas partes del mundo comienzan a recibir el nuevo año de diferentes formas y en distintas zonas horarias. Entre las primeras grandes ciudades que recibieron al 2016 se encuentran Auckland, en Nueva Zelanda, y poco después Sidney, en Australia.
Japón continuó en la lista dándole la bienvenida al Año Nuevo y lo celebraron ofreciedo al mundo un impactante show de fuegos artificiales. Las celebraciones del Año Nuevo en Japón suelen durar tres días, tiempo en que los ciudadanos tienen reuniones con sus familias y adornan sus casas con decoraciones hechas de bambú y pino. Asimismo, en la última noche del año, comen fideos de soba con el objetivo de repeler malos espíritus.
Los primeros en celebrar el Año Nuevo fueron los habitantes de las islas Kiribati y Samoa, dos países del océano Pacífico, situados al noreste de Australia. Quince minutos después, los habitantes del archipiélago neozelandés de Chatham, situado al sureste de las principales islas de de Nueva Zelanda, festejaron la llegada del 2016, con el tradicional árbol Pohutukawa.
En las siguientes horas, el continente americano se prepara para recibir al año entrante con espectáculos de fuegos artificiales y dar por terminado el 2015.