El presidente Luiz Inácio Lula da Silva, del Partido de los Trabajadores (PT), logró ayer la reelección por otros 4 años al vencer a su rival, el socialdemócrata Geraldo Alckmin, por más de 20 puntos porcentuales. De acuerdo con los informes de la justicia electoral, Lula aventajó a Alckmin por el 60,83 % al 39,17 %.
"El presidente Luiz Inacio Lula da Silva fue reelecto", dijo Marco Aurelio de Mello, el presidente de Tribunal Superior Electoral al término de la jornada que llevó 126 millones de brasileños a las urnas.
La victoria de Lula fue pronosticada por todas las encuestas de intención de voto. Dos sondeos realizados entre el viernes y el sábado por Ibope y Datafolha le atribuían una ventaja de 22 puntos porcentuales, 61% a 39%. El nuevo mandato de Lula comenzará el 1 de enero de 2007.
En el primer turno, el 1 de octubre, Lula había obtenido el 48,7% contra el 41,7% de Alckmin. La campaña por el balotaje fue mejor encarada por Lula, quien, por un lado, oxígeno su partido y su comando electoral, que quedaron involucrados en un escándalo por la frustrada compra de datos reservados para perjudicar a un rival y, por el otro, arrinconó a su rival al acusarlo de promover un retorno a las privatizaciones de las empresas nacionales.
Además, Lula se mostró en todo momento como la única garantía de las políticas de asistencia social, que le granjearon un masivo apoyo de los sectores populares. Tan seguro del triunfo estaba que ya en los últimos días el presidente comenzó a realizar gestiones para renovar su gabinete con vistas al segundo mando.
Uno de sus objetivos es hacer lugar a sus nuevos aliados del Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), una fuerza moderada y muy pragmática con la que aspira a controlar el Congreso, el centro de la vida política de ese país.
El balotaje terminó a las 17 en casi todos los estados brasileños, pero se siguió votando hasta las 19 en Amazonas, Mato Grosso, Mato Grosso do Sul y Acre. Por ese motivo, estuvo prohibido difundir bocas de urnas y resultados parciales hasta esa hora. También se han elegido los gobernadores de 10 estados, como Río de Janeiro, Río Grande do Sul, Paraná, Santa Catarina y Pará.
Lula votó ayer a la mañana en Sao Bernardo do Campo, en el conurbano paulista, y se mostró seguro del triunfo, que le fue pronosticado por todas las encuestadoras, con más de 20 puntos de ventaja sobre el socialdemócrata Geraldo Alckmin.
El presidente agradeció a Dios por la segunda vuelta y sostuvo que "la reelección es una cosa importante. El pueblo supo reconocer el trabajo hecho en estos 4 años y fue muy generoso".
"Los brasileños saldremos de esta segunda vuelta más unidos que nunca para realizar los grandes proyectos que Brasil precisa", agrego, con relación a su desafío número 1: unir al electorado, que, contrariando la cultura política conciliatoria de los brasileños, se mostró rabiosamente dividido en estas elecciones entre "lulistas" y "antilulistas".
La jornada electoral transcurrió en calma, con 243 personas detenidas por delitos electorales.
*Editor de Internacionales del diario Perfil y autor de "Lula, la izquierda al diván".