Reno, EE.UU. `- Los aspirantes a las candidaturas demócrata y republicana a la Casa Blanca tienen una nueva cita con los votantes hoy en Nevada (oeste) y Carolina del Sur (sudeste), dos electorados muy codiciados cuando aún no se ven claros favoritos en ninguno de los partidos.
Nevada, terreno para la batalla demócrata, tiene el desafío de la comunidad hispana, que con 12% del electorado podría marcar la diferencia en caso de resultados reñidos en noviembre, cuando la pelea sea por la presidencia.
Aunque en los caucus de Nevada tienen cita los aspirantes de ambos partidos, los republicanos tienen sus baterías puestas en la votación de Carolina del Sur, donde los demócratas votan recién el 26 de enero.
Mientras el presidente George W. Bush anunciaba ayer los lineamientos de su plan de estímulo económico, los demócratas de Nevada vieron recrudecerse la campaña de sus dos favoritos, Hillary Clinton y Barack Obama, que plantearon sendas visiones de la economía en un estado muy castigado por la crisis de los préstamos hipotecarios, que hace planear la amenaza de una recesión en el país.
Pese al apoyo que recibió de dos potentes sindicatos hoteleros, Obama está 9 puntos por detrás de Clinton (32% contra 41%), según un sondeo de ayer que coloca al ex senador John Edwards tercero con 14%.
En esta oportunidad la votación no será en las urnas sino en los caucus: asambleas de electores donde se designa públicamente a los delegados que representarán a cada candidato en la convención nacional del partido, de la que surgirá el nombre de quien disputará la Presidencia.
También los republicanos tienen cita en Nevada, pero sólo el ex gobernador de Massachusetts Mitt Romney hizo campaña, confiado en atrapar a los indecisos con su aura de magnate, que le ayudó a ganar el martes en Michigan.
Sus principales adversarios, Mike Huckabee y John McCain, apuntaron sus baterías a la primera cita en el sur del país (Carolina del Sur), que desde 1980 ha dado al vencedor de la candidatura del Partido Republicano.
El senador de Arizona (suroeste) John McCain, ganador en New Hampshire y a quien los sondeos dan con una pequeña ventaja en Carolina del Sur, buscará una revancha de las primarias de 2000, cuando debió abandonar la liza.
Pero su adversario principal, el ex gobernador de Arkansas Mike Huckabee, le pisa los talones y tiene su campaña enfocada en la derecha cristiana y especialmente a los evangélicos, muy influyentes en el sur de Estados Unidos.
Este ex pastor bautista, ganador en Iowa, dijo que si llega a la Casa Blanca modificará la Constitución para prohibir el aborto y el matrimonio entre homosexuales.
La contienda se vuelve cada vez más reñida en los dos bandos, pues se trata de las últimas citas electorales antes del "supermartes" del 5 de febrero, cuando las elecciones primarias se llevarán a cabo en una veintena de estados, incluidos los claves de California y Nueva York.
Fuente: AFP