La familia real de Holanda, a la que pertenece la argentina Máxima Zorreguieta, quedó envuelta en medio de una polémica por los millonarios gastos realizados entre 2001 y 2006, según reveló el canal el canal de TV RTL Nieuws.
Sólo en 2006, la monarquía habría gastado 114 millones de euros, un 36% más que lo consumido en 2004. Los gastos, nada más que en transporte aéreo de los suegros de la princesa Máxima, llegaron a ocho millones de euros entre 2001 y 2006, según revela el informe.
Para establecer una comparación con otras monarquías, TV RTL Nieuws aseguró que la corona española gastó apenas ocho millones durante todo el año 2006.
Los gastos de la familia real holandesa harían una media anual de unos 1,3 millones de euros, entre cinco y seis veces más que los 205.000 euros declarados por el Ministerio de Transportes en 2004 y los 275.000, en 2005.
La imagen de la monarquía se vería dañada por esta ostentación de riqueza, en especial por los gastos que realiza la reina Beatriz, la única que puede disponer sin limitaciones del transporte gubernamental.
Según la cadena televisiva, que elabora informes a partir de los presupuestos públicos del Gobierno, la realeza holandesa está traspasando los límites económicos de los que dispone para realizar sus gastos.
A partir de esta revelación, algunos legisladores de Holanda cuestionaron en el Parlamento los gastos de la realeza que salen de los impuestos de todos los ciudadanos y se preguntaron si tenía sentido mantener una monarquía tan costosa en el siglo XXI.
A pesar de los cuestionamientos, no se permitió publicar la lista detallada de los gastos de la monarquía. El primer ministro holandés, Jan-Peter Balkenende, rechazó las peticiones que buscaban la publicación íntegra de los consumos de los reyes.