Luego del escándalo por la relación que Fernando Lugo, mantuvo con Viviana Rosalith Carrillo Cañete cuando éste aún era obispo y el reconocimiento de su paternidad por parte del presidente paraguayo, la imagen del mandatario parece estar cayendo en picada. Al menos, así lo asegura una empresa encuestadora que realizó un sondeo sobre su popularidad antes y después del 13 de abril, día en el que el ex religioso reconoció ser padre de un niño fruto de su vínculo con la que entonces era una joven de 16 años.
La empresa Servicios Digitales S.A. se encargó de hacer una encuesta de opinión sobre la honradez de Lugo y si volvería a votar al presidente paraguayo. La conclusión resultó bastante desalentadora: en tan solo un día, la imagen del jefe de Estado de Paraguay cayó un 16 %.
Antes de hacerse pública la noticia sobre la relación sentimental que había mantenido con Viviana Rosalith Carrillo y su paternidad, casi un 65% de los paraguayos creían que Lugo era un presidente "muy honrado". Sin embargo, luego que estallara el escándalo sólo un 48% mantuvo su posición original y más del 30% aseguraron que era "poco" honrado, mientras algo más del 10% opinó que no era "nada" honrado.
Otro segmento del estudio, donde se preguntaba si los paraguayos volverían a votarlo en las próximas elecciones, reveló que del 40,85% que había dicho que sí lo votaba, luego del escándalo había bajado al 31 %. Los resultados indicaron que indefectiblemente que la imagen del presidente Lugo ha caído un 16% luego de revelarse su condición de padre.
Los obispos dijeron mediante un comunicado que lo ocurrido el pasado lunes, había dañado también la imagen de la Iglesia: “Son hechos que repercuten para bien o para mal. La Iglesia Católica está conformada por seres humanos. Desde ese punto de vista todo lo que pasa para bien va a favor de ella, y todo lo que pasa en forma negativa va en su desmedro”, indicó el obispo de la Diócesis de Cordillera.