De poco sirvió, al parecer, la primera manifestación pública del Papa tras la controversia con el mundo musulmán, donde se mostró “profundamente triste” por las “reacciones suscitadas por un breve pasaje” del discurso que pronunció la semana pasada en Alemania, donde calificó de “irracional” la guerra santa.
El vocero del gobierno iraní, Gholam-Hoeein Elham, declaró ayer que las explicaciones del Papa –que no expresó el arrepentimiento que se esperaba - eran "necesarias pero no suficientes".
"Tiene que decir más claramente que lo que dijo es un error y corregir" sus declaraciones, agregó el funcionario. Malasia, según informó su ministro de Relaciones Exteriores, Syed Hamid Albar, también se manifestó en este sentido diciendo: "Durante todo este tiempo, los musulmanes se han sentido consternados y las declaraciones del Papa en las que expresaba sus excusas ante la ola de indignación no son suficientes para calmar la ira".
Mientras el influyente religioso qatarí, Yussef Al-Qaradaui, hizo un llamado a los musulmanes a hacer del próximo viernes un “día de cólera” pacífico contra comentarios sobre Sumo Pontífice, las reacciones de gran parte de grupos islámicos llegaron con violentas amenazas.
Unos cien miembros de un grupo islámico radical indonesio manifestaron en Yakarta con distintos carteles que decían: "Crucifiquen al Papa", "Vaticano, eje de Satán" y "El Profeta es sublime, el Papa es pequeño y vil".
La rama iraquí de la red terrorista Al Qaeda prometió continuar la yihad (guerra santa) hasta "la derrota" de Occidente en un mensaje que sostenía: "Decimos al servidor de los Cruzados (el papa): prepárese a la derrota (...) Decimos a los infieles y a los tiranos: prepárense a lo que los aflija. Seguiremos nuestra yihad. Sólo nos detendremos cuando la bandera de la unicidad flote en todo el mundo".
Además, unos 500 manifestantes quemaron ayer en Basora (sur de Irak) una imagen del Papa y prendieron fuego a las banderas estadounidense y alemana, para protestar contra las declaraciones del papa Benedicto XVI sobre el islam.
Cabe recordar que el domingo una religiosa italiana de 72 años y su guardia somalí fueron asesinados por desconocidos en un hospital de niños de la capital, Mogadiscio, en un episodio que coincide con esta ola de protestas provocada en el mundo musulmán por los comentarios del papa Benedicto XVI sobre el Islam y la violencia.
Por último, siete países árabes junto a Turquía e Irán, reclamaron al Papa "disculpas claras y francas" por sus controvertidos comentarios sobre el Islam, al término de una reunión de sus ministros de Interior en la ciudad saudí de Jeda. El encuentro, centrado en los medios de restablecer la seguridad en Irak, reunió a los ministros de ese país, Arabia Saudí, Jordania, Bahréin, Siria, Egipto, Kuwait, Irán y Turquía.
Radicales islámicos piden la crucifixión del Papa
A pesar de las palabras de arrepentimiento expresadas por Benedicto XVI, la comunidad islámica continúa ofendida. Algunos siguen con sus amenazas de ataque a Santo Padre y otros exigen un "perdón más sincero".
