Tras cuatro años de la desaparición de Madeleine McCann, la policía británica de Scotland Yard decidió reabrir una nueva línea de investigación. La reapertura llega después de que los padres de Madeleine exigieran al primer ministro David Cameron una nueva revisión del caso.
La policía británica Scotland Yard dedicará 30 detectives y millones de libras a reinvestigar el caso de Madeleine, la niña inglesa de tres años que desapareció en el Algarve portugués en 2007.
En un reciente libro que publicaron los padres de la menor, Kate y Gerry McCann, relatan la experiencia,a la que se refieren como una "pesadilla sin fin". La madre además cuenta "las visiones horribles" de las que fue presa, según pasajes publicados por la prensa británica.
Los padres eligieron el día en que la pequeña cumpliría 8 años para lanzar el libro de 384 páginas, titulado 'Madeleine' y escrito por Kate "de su puño y letra", según aseguró esta última.
Las ventas de este libro están destinadas a un fondo con el que los McCann pagan los servicios de detectives privados.
El ex inspector portugués a cargo de la investigación también publicó un libro en el que afirmaba que la niña estaba muerta y que sus padres podrían haber disimulado su cadáver. El libro fue retirado de la venta tras una demanda de los McCann.
La niña británica desapareció el 3 de mayo de 2007, pocos días antes de su cuarto cumpleaños, cuando dormía en su apartamento de Praia da Luz (Portugal), donde la familia estaba de vacaciones. Esa noche, sus padres habían acostado a 'Maddie' y a sus hermanos para ir a cenar con unos amigos a 120 metros de allá.
Convencidos de que la pequeña fue secuestrada, hoy los McCann quieren restablecer la verdad. "No tengo la sensación de que nos dieran la oportunidad en Portugal de decir lo que sabíamos", explicó Kate, quien dijo haber buscado ser "lo más honesta posible" en el libro, donde cuenta su calvario, sus ganas de suicidarse y sus pesadillas nocturnas.
