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Escndalo en londres

Renuncia una ministra británica que le compraba pornografía al marido con fondos públicos

Se trata de Jacqui Smith, titular de la cartera de Interior. Las otras denuncias en su contra y la opinión de los ingleses sobre sus políticos.

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| EFE

La ministra del Interior de Reino Unido, Jacqui Smith, renunciará por el escándalo desatado al descubrirse que usaba fondos oficiales para pagar la pornografía que consumía su marido. Smith dejará su cargo antes del próximo lunes, y son varios los funcionarios que buscan quedar bien ubicados para reemplazarla, informaron los medios británicos en base a fuentes gubernamentales.

Smith, de 46 años, ya había presentado su renuncia al primer ministro Gordon Brown hace dos meses. Fue en  marzo, cuando estalló el escándalo al descubrirse que había usado fondos oficiales para pagar películas porno que miraba su marido.

Pero ese es sólo una de las acusaciones contra la funcionaria: también denuncian que estafó al Estado, ya que declaró vivir en una habitación de la casa de su hermana para lograr que los contribuyentes le paguen el alquiler de una casa de cinco dormitorios en la región de Reddith, según informó el diario británico The Sun.

Junto a la ministra de Familia Beverley Hughes, Smith renunciará antes del recambio de gabinete del próximo lunes, para evitar que la eche el Primer Ministro Gordon Brown. Ahora quiere presentarse como candidata en las próximas elecciones legislativas.

La presión política se extendió ayer a otros dos ministros del gabinete de Brown: el titular del Tesoro, Alistair Darling, y el de Transporte, Geoff Hoon. Ambos presentaron sus disculpas por errar en el cálculo de sus sus gastos a cargo del Estado y anunciaron que devolverán los importes.

Anteriormente, tres diputados anunciaron que no se presentarán a los próximos comicios: justamente la titular de Familia, Beverly Hughes; la ex ministra de Salud Patricia Hewitt y el parlamentario David Chaytor.

Dos días antes de que Reino Unido celebre las elecciones al Parlamento Europeo, muchos indicios apuntan a que Darling ser destituido como ministro del Tesoro. Brown no garantizó en entrevistas anteriores que su principal ministro vaya a mantenerse en el cargo.

Además de errores en el cálculo de gastos a cuenta del Estado, Darling está acusado de cambiar muy seguido de segunda vivienda y de cargar a las arcas públicas los costes de su asesor fiscal. Así, el funcionario podría perder su cargo en los próximos días si se reestructura el gabinete ministerial, una medida que se espera para después de la prevista debacle laborista en los comicios europeos.

Mientras, la población cada vez tiene una imagen peor de la clase política. Casi uno de cada dos británicos (un 48 por ciento) cree, según un sondeo de la BBC, que los políticos son corruptos. Y cerca de dos tercios (un 62 por ciento) opina que los políticos piensan primero en sus intereses y luego en los del país.