La situación ante Siria tiene tres estadios. Por un lado la diplomacia, por otro lado la presión interna en Estados Unidos y por último la posible intervención armada en Siria.
Sobre esta última en el Mediterráneo esperan buques norteamericanos apoyados por bases en países como Turquía y Jordania. A la par, el Pentágono discute planes con aliados franceses y sauditas, mientras que informa a Israel diariamente sobre posibles blancos y reacciones que pudieran suceder.
La cantidad de desplazados que viven en carpas en las fronteras con Siria ya suma cientos de miles. El conflicto entra en la semana más compleja luego del ataque con gas Sarín del pasado 21 de Agosto a su población atribuido por los norteamericanos a Assad.
En el día de hoy, y en una gira por Francia e Inglaterra, luego de discutir con líderes europeos, el Secretario Kerry les envió un ultimátum a los sirios: "Entreguen las armas químicas, tienen una semana". A las horas, Moscú por primera vez reaccionó y dijo que iba a discutirlo con Damasco. Los sirios reaccionaron positivamente y dijeron que estaban de acuerdo en un control internacional de su arsenal químico.
“La única razón por la cual tenemos alguna dinámica hoy con Siria y los rusos es por la presión que les estamos haciendo con la posibilidad de realizarles un ataque armado. Tenemos enorme información sobre cómo se produjo el ataque. No podemos aún comentar todo lo que sabemos pero estamos informando al Congreso al respecto y esperamos que los legisladores entiendan la necesidad de mantener esta presión militar” dijo esta tarde Jay Carney, el vocero de Obama. “Si tenemos que dialogar con los rusos, ya lo haremos, pero por meses ellos han evitado los controles y la salida política en Siria de un líder sin credibilidad como Assad. Sabemos que el régimen usó varias veces armas químicas y somos escépticos”.
Obama dará un discurso al país mañana martes por la noche desde la Casa Blanca. Durante estas horas continuará reuniéndose con congresistas y visitará el Senado. El gobierno norteamericano sigue insistiendo con la necesidad de hacer una intervención limitada en Siria, la cual dice no será una guerra abierta sino una quirúrgica operación con misiles de largo alcance en las cuales derribarán la capacidad militar siria de utilizar armas químicas en su población. Está claro que de atacar Siria, varias bases aéreas y los destacamentos del ejército sirio correrán la suerte de ser inutilizados si los norteamericanos entran en acción.
“En Washington escuchamos las distintas voces pero el presidente volverá a explicar el porqué de la necesidad de una acción militar en Siria. Lo hará nuevamente y le dirá a la ciudadanía lo que pasó, el porqué es necesario una intervención, los riesgos que se corren si no hacemos nada y los efectos. El presidente tiene la posibilidad de actuar sin la autorización del Congreso pero somos más fuertes si estamos unidos en EEUU frente a esta decisión” explicó el vocero de Obama.
Obama tendría mayores chances de lograr una aprobación en el Senado, porque ahí tiene mayoría. El problema lo tiene en la Cámara de Representantes. Muchos republicanos y también demócratas, cansados de las guerras, podrían complicarle sus planes militares en Siria. Para lograr una aprobación se necesitan 217 votos y según dicen los analistas, Obama por ahora sólo cuenta con la mitad.
Adicionalmente a Kerry se le complica el cuadro internacional sin tener una autorización por parte del Consejo de Seguridad siempre bloqueado por Rusia. Ayer los franceses sugerían volver a votar en la ONU y exponer de nuevo públicamente a los rusos con su veto (al que se les suma China, nunca interesada en las intervenciones extranjeras). Mientras tanto Assad en un reportaje de la TV norteamericana se declara inocente y hay que ver si los norteamericanos terminan aceptándole una salida política. Todo puede pasar en los próximos días.
(*) Especial para Perfil.com