Miami – El debate sobre la legalidad de la inyección letal en los Estados Unidos provocó la postergación de todas las ejecuciones desde hace dos meses, aunque un convicto condenado en Florida recibió hoy, sólo cuatro horas antes de recibir su pena, la suspensión de la medida por parte del Tribunal Supremo de Florida.
Se trata de Mark Dean Schwab, de 38 años, quien fue condenado por la violación y el asesinato de un niño de 11 años en 1991.
Después del mediodía (a las 14), la Corte Suprema –que no autoriza las inyecciones letales desde el 25 de septiembre pasado– ordenó la suspensión de la ejecución que estaba prevista para las 18 (hora local).
El recluso habría sido el primer condenado ejecutivo en Florida desde diciembre del 2006, cuando tuvo lugar la agónica ejecución de Ángel Díaz, quien mostró una dolorosa agonía y luchó por respirar hasta el último minuto, antes de tener convulsiones y fallecer tras media hora de sufrimiento.
Es que, según indicaron los especialistas, las agujas habían penetrado demasiado profundo en el cuerpo de Díaz, además de que las tres dosis mortales fueron inyectadas en sus músculos y no en sus venas, tal como está indicado en esos casos.
Por ese motivo, se reabrió un intenso debate por el método de aplicación de la pena de muerte, ya que, además, durante el transcurso de este año, en los Estados Unidos fueron ejecutadas 42 personas, todas por medio de la polémica inyección letal.
Ahora, el Tribunal Supremo deberá revisar el caso de los condenados a la pena capital, dando lugar a quienes alegan que el método de inyección letal viola la Constitución Nacional norteamericana.
Fuente: AFP