La Paz - Tras informar ayer el robo de fusiles calibre 7.62 mm de la Fuerza Naval que podrían ser utilizados por extremistas opositores al presidente Evo Morales, el Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas de Bolivia, General Wilfredo Vargas, advirtió que sus subordinados defenderán al Gobierno y repelerán cualquier situación de violencia en torno a los cabildos que sectores conservadores realizarán este viernes en las regiones de Santa Cruz, Trinidad, Cobija y Tarija, al parecer con la intención de declarar la autonomía de tales territorios.
“Las fuerzas armadas son del Estado boliviano y tienen por misión garantizar al gobierno legalmente constituido, pero tengo confianza en que el diálogo político solucionará los problemas'', manifestó a radio Erbol el jefe militar, quien aclaró que “si la situación amerita y con orden expresa del capitán general de las fuerzas armadas (el presidente Morales), nosotros podríamos intervenir”.
Vargas reconoció haber recibido un pedido de Germán Antelo, uno de los líderes del sector opositor radicado en Santa Cruz, para que el Ejército se muestre neutral frente a la disputa, pero descartó que vaya a aceptarlo diciendo que “eso no amerita ninguna respuesta, ya que las fuerzas armadas tienen un rol''.
Por su parte, el ministro de la presidencia, Juan Ramón Quintana, declaró ante los medios que Santa Cruz se vive un clima de violencia “que quiere desbordar la Constitución''. Según informes de inteligencia, el armamento robado sería utilizado allí por extremistas para luego acusar a las Fuerzas Armadas de emplear armas reglamentarias en contra de civiles.
En las últimas horas, en tanto, periodistas no afines a los movimientos separatistas fueron hostigados y amedrentados por la extrema derecha cruceña. Luego de criticar a los grupos de poder de la región, por ejemplo, el conductor del programa televisivo “No nos mintamos”, Efraín Montero, denunció haber sido golpeado por cinco jóvenes en plena calle, en un hecho que fue condenado por la Federación de Trabajadores de Prensa de Santa Cruz.
Las “fuerzas de choque” de los secesionistas estarían integradas básicamente por miembros de la Unión Juvenil Cruceñista, aunque según rumores publicados por la prensa internacional también mercenarios extranjeros habrían sido contratados por los comités cívicos que, en representación de intereses oligárquicos, intentan proclamar la independencia de los territorios en cuestión.
Pero no todas son contras en Santa Cruz para el presidente Evo Morales, ya que también allí comenzaron a realizarse cabildos populares en su apoyo como el que esta tarde, en la población norteña de San Julián, decidió iniciar un particular “piquete” por 24 horas para impedir que “gente comprada vaya a engrosar la convocatoria” de los opositores al Gobierno.
La medida fue tomada en el marco de una concentración popular en la plaza principal de la localidad, de la que participaron más de dos mil campesinos provenientes de distintos municipios.