El excapitán de las SS y responsable de la matanza de las Fosas Ardeatinas, cuyos funerales provocaron enormes polémicas en Italia al punto que debieron ser suspendidos, fue enterrado en secreto en una prisión de ese país, aunque no trascendió el nombre del centro carcelario, informaron medios italianos.
El lugar de la tumba, identificada por un número en la cruz, sólo está en conocimiento de sus familiares, reveló el diario Repubblica de Roma en un artículo del director de ese medio, Ezio Mauro. El diario publicó también una foto del pequeño cementerio invadido por la vegetación. “Sobre la sepultura está el timbre del secreto de tercer grado de parte del Estado", especifica el artículo reproducido por la agencia ANSA.
"Si no se puede hacer conocer el lugar que hospeda la tumba, subrayó, es justo hacer saber que este caso está concluido, la democracia responde a sus deberes y por ende retoma sus derechos", indicó.
Mauro reconstruyó los momentos del traslado de los restos del exoficial de las SS. "Había dos hombres en el auto llegado a las 3.45 de la mañana al aeropuerto militar de Pratica di Mare (cerca de Roma), pero uno sólo sabía adonde iban (...) en la noche entre un sábado y un domingo de fines de octubre".
En la tumba hay una cruz de madera con un número que está "conservado en un sobre lacrado en la caja fuerte del funcionario que piloteó la operación". "Será entregado al hijo de Priebke que en diciembre llegará de Nueva York", indicó el periodista.
"El director de la cárcel, convocado a Roma para saber que recibiría al huésped más indeseado de Italia, regresó con el vínculo del secreto, ni siquiera los guardias conocen el nombre del último llegado y naturalmente no lo saben el alcalde, el presidente de la región, la comunidad ciudadana".
"A través del secreto, el autor de una matanza pudo tener sepultura que una democracia debe asegurar...es un gesto de civilización y un acto de humanidad que debe acompañarse con el recuerdo de lo ocurrido, para no perder la noción del Bien y del Mal, por ende del juicio", añadió.
El diario Repubblica no dio más detalles sobre el lugar donde se encuentra la cárcel para evitar que el sitio se convierta en un lugar de reunión de neonazis.
Peso histórico. Priebke fue uno de los responsables de la matanza de las Fosas Ardeatinas, ocurridas en 1944. Del ataque resultaron 335 víctimas civiles, como represalia a un embate partisano días antes en la capital italiana, donde murieron 33 soldados de un regimiento alemán del Alto Adigio.
Extraditado de Bariloche, Argentina, adonde se había refugiado tras concluir la II Guerra Mundial, fue procesado en Italia y condenado a cadena perpetua. Por razones de edad, vivió durante 15 años bajo arresto domiciliario.
Su funeral provocó una fuerte polémica: ningún municipio, ni en Italia, ni en Alemania (donde nació) ni en Argentina, donde vivió más de 40 años, aceptaron recibir sus restos.
Finalmente, las exequias religiosas fueron celebradas en un seminario de la Fraternidad Pío X en Albano Laziale, cerca de Roma, donde hubo grandes desórdenes que obligaron a su suspensión.
