POLICIA
mañana arranca el debate

Batalla de peritos en el juicio contra el femicida del country

Rafael Herrera Milano adelanta que la parte psiquiátrica será medular y que se discutirá si Farré pudo dirigir sus acciones.

2805_femicidio_farre_cedoc_g
Asesino. En agosto de 2015, Fernando Farré mató a su esposa de 74 puñaladas. Está preso en el penal de José León Suárez. | cedoc

“Una batalla de peritos”. Así define el médico psiquiatra Rafael Herrera Milano el juicio que comenzará mañana contra Fernando Farré, el empresario que mató a su ex esposa, Claudia Schaefer, en un exclusivo country de Pilar, en agosto de 2015.

Herrera Milano, uno de los peritos que analizaron la psiquis del femicida, declarará en el debate. Antes, habló con PERFIL.

—¿Cuáles son las diferencias con los peritos de la defensa?

Esto no les gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Hoy más que nunca Suscribite

—Hubo un dictamen de los peritos oficiales, el cual nosotros firmamos de conformidad. El perito de la defensa hizo un informe aparte. Como es de público conocimiento, ellos van por la línea de la inimputabilidad o la emoción violenta, que es totalmente contrapuesta a lo que sostenemos los peritos de la querella y los peritos oficiales. Es ahí donde se va a dirimir el juicio.

—¿La cantidad de lesiones muestra un grado de ensañamiento?

—Fueron 74 lesiones corporales de diferente gravedad, una letal, que fue el degüello. Este tipo de temas de tinte legal y psiquiátrico es el que se va a debatir en el juicio. No me puedo adelantar y dar una opinión.

—¿Qué fue lo que más impactó del caso?

—Se trataba de una persona exitosa profesionalmente. El impacto del caso viene relacionado con el estatus socioeconómico que tenía el imputado cuando, en realidad, la sociedad está acostumbrada a que esto pase en otros estratos, lo que no significa que esto siempre sea así. El femicidio no está asociado a una clase socioeconómica determinada. El planteo pasa por otro lado: acá muchas veces lo que se cuestionaba es si a una persona con menos recursos se la estudia con la misma profundidad que se estudió a esta persona. Por más que la inimputabiliad sea un concepto legal, tiene un trasfondo psiquiátrico-psicológico. Lo mismo que la emoción violenta. Una persona es imputable si tiene la aptitud psíquica suficiente para entender el significado de sus actos y controlarlos acorde a esa comprensión. En el trasfondo tiene que haber una afección psiquíca. Lo mismo ocurre con la emoción violenta, que lleva al individuo a perder los frenos inhibitorios porque está inmerso en un impulso irrefrenable. Esto no significa que no comprenda la criminalidad del acto.

—Será un juicio por jurados, ¿será diferente al ordinario?

—En primer lugar, es novedoso. El gran desafío en este juicio, donde la parte psiquiátrica es la médula, va a ser bajar conceptos muy complejos a un dialecto común para que el jurado lo pueda entender y pueda decidir en base a eso.

—¿En el juicio por jurado puede influir el carisma de los protagonistas?

—Todo influye. Hay que entender que las personas que integren el jurado van a ser de diverso nivel sociocultural, diversa instrucción. Son los que van a dirimir la cuestión, va a ser una batalla de peritos porque acá lo crucial es si entendió o no entendió lo que hizo y si pudo dirigir sus acciones. La autoría no está en duda.